Carlos López Mendoza, vocero oficial de Cruz Roja Salvadoreña se retira de su periodo laboral
¡HONOR A QUIEN HONOR MERECE!
Redación Voz de la Diáspora
En El Salvador, el vocero oficial Carlos López Mendoza, ha decidido retirarse de su periodo laboral y gozar de su jubilación, después de 30 años de formar parte del personal administrativo de dicha institución; sin embargo han sido un total de 46 años los que ha brindado servicio a la Cruz Roja Salvadoreña, 16 de los cuales fue voluntario, logrando ejercer diferentes cargos al interior de la institución como socorrista, entre los que se destacó como: jefe de la Escuela de Socorrismo a Nivel Nacional, jefe de Brigada, jefe de la Zona Central y miembro de la segunda promoción de la Unidad de Rescate de la cual además fue instructor.
“Don Carlitos” como es conocido por todos, en cada una de sus acciones dentro y fuera de la institución ha demostrado un verdadero espíritu altruista, caracterizado por su humanismo, solidaridad, entrega y sacrificio hacia los más vulnerables, así lo describen.
López Mendoza, durante sus años de labor humanitaria y servicio al pueblo salvadoreño, participó en diversas operaciones de emergencia, tanto internas como externas del país, en las cuales en muchas ocasiones ha sacrificado su bienestar para ayudar al más indefenso.
Entre las operaciones más destacadas están: El Huracán Fifi (septiembre 1974), el terremoto en Guatemala (1976), los 12 años de conflicto armado en el país y en la firma de los Acuerdos de Paz, el terremoto en San Salvador (1986), los dos terremotos del 2001 en El Salvador, el Huracán Stan y la erupción del volcán Ilamatepec.
Su retiro lo hace a los 81 años de edad y bajo el cargo de vocero oficial de la institución, lo cual lo ha posicionado en los diferentes medios tanto nacionales como internacionales, ya que por su carisma, habilidad y capacidad informativa ha sido considerado en el ámbito humanitario como fuente de noticia referente a Cruz Roja Salvadoreña.
Su mayor esfuerzo se destaca precisamente su carácter empírico en el área, es lo que ha hecho ganar su admiración y aprecio por su extraordinaria cualidad humanitaria.
Carlos López Mendoza fue declarado Hijo Meritísimo de El Salvador en el año 2016, su humanismo y compromiso hacia los más necesitados, sigue demostrándolo con su deseo de continuar en la institución pero ahora únicamente como voluntario, por lo que siempre la institución contará con su presencia y apoyo.
La Gran familia de la Cruz Roja Salvadoreña está altamente agradecida por su entrega durante su gestión y respetando las disposiciones de prevención por el COVID-19.
