Por Elida Moreno
Panamá reportó la muerte de cuatro migrantes indocumentados cuando atravesaban la peligrosa selva de Darién fronteriza con Colombia en medio de la crisis sanitaria por el coronavirus, y el creciente tránsito de extranjeros en las última semanas, en su mayoría en ruta hacia Estados Unidos.
El Servicio Nacional de Migración dijo en un comunicado que “en las últimas semanas se ha registrado el fallecimiento de cuatro migrantes irregulares, tres hombres y una mujer”, cuya nacionalidad no fue especificada.
Las víctimas habrían muerto ahogados ante la crecida de los ríos al aproximarse la estación lluviosa tanto la mujer que fue encontrada en el área de Villa Caleta, como dos hombres en la comunidad de Charco Chivo y otro migrante cuyo cuerpo fue ubicado a unos 15 minutos de la comunidad de Río Arriba, en la provincia de Darién.
La selva darienita es considerada una de las regiones más peligrosas del mundo, la cual se ha convertido en una ruta obligada para los miles de migrantes en su mayoría extracontinentales y haitianos que buscan llegar a Estados Unidos enfrentándose a las condiciones inhóspitas de la zona, y bandas de delincuentes.
En un comunicado previo la Cancillería panameña explicó que había pedido al gobierno colombiano un acuerdo de flujo controlado similar al que establecieron en 2016 con Costa Rica para evitar que se produzca una crisis migratoria, luego que en las últimas semanas se registrara un incrementó en el tránsito de extranjeros indocumentados.
Durante el primer trimestre de 2021, han ingresado de manera irregular a Panamá unos 7,150 migrantes, de esos unos 4 mil lo hicieron en marzo, sin controles previos de bioseguridad, a pesar de la existencia de disposiciones en materia de salud en los países por los que transitan, agregó.