
Redacción Voz de la Diáspora
Unos 70.8 millones de personas fueron forzadas a abandonar sus hogares por causa de guerras, conflictos y persecución en 2018 alrededor del mundo, la cifra más alta en casi siete décadas, según el informe de Tendencias Globales de Desplazamientos Forzados del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) develado en Ginebra.
La estimación es “conservadora” ya que sólo refleja de manera parcial la crisis en Venezuela, pero duplica el número de personas desplazadas hace 20 años, y supone 2.3 millones más que el año previo, de acuerdo al estudio.
En total, unos 4 millones de venezolanos han salido de su país, convirtiéndose en una de las mayores crisis recientes de desplazamiento en el mundo, aunque la mayoría de estas personas necesita protección internacional como refugiados, a la fecha, apenas medio millón ha solicitado asilo de manera formal, dijo el organismo que cita datos oficiales de distintos gobiernos.
El Alto Comisionado de ACNUR, Filippo Grandi aseguró que las cifras reconfirman la tendencia al alza a largo plazo en el número de personas que necesitan protección tras huir de sus hogares por múltiples causas.
Grandi aseguró que si bien el lenguaje en torno a las personas refugiadas y migrantes es a menudo controvertido, también se ha despertado interés genuino y solidaridad, en especial por parte de las comunidades de acogida.
“…constatamos una implicación sin precedentes por parte de nuevos actores, tanto del sector de la ayuda al desarrollo, la empresa privada o los particulares, que no solo refleja, sino también canaliza la esencia del Pacto Mundial sobre Refugiados”, afirmó.
ACNUR estima que en promedio, el número de nuevos desplazamientos equivale a 37,000 personas por día en el mundo.
Del total de desplazados en 2018, 25.9 millones fueron refugiados, medio millón más que el año anterior, incluidos cinco millones y medio de refugiados palestinos que se hallan bajo el mandato de la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA, por sus siglas en inglés), afirmó ACNUR.
El segundo grupo está formado por solicitantes de asilo, que son personas fuera de su país de origen y reciben protección internacional, quienes sumaron 3.5 millones alrededor del mundo, sin embargo, el más numeroso son los desplazados internos en sus propios países que alcanzaron 41.3 millones.
ACNUR dijo que a raíz de la complejidad del problema en el caso de los refugiados además de una mayor solidaridad, se necesita que puedan regresar a sus hogares de manera voluntaria y en condiciones dignas y seguras, integración en la comunidad de acogida o el reasentamiento en un tercer país.
No obstante solo 92.400 refugiados fueron reasentados en 2018, menos del 7% del total de personas a la espera de su reasentamiento, unos 593.800 pudieron retornar a sus hogares, y 62.600 se nacionalizaron.
En cualquiera de las situaciones, Filippo Grandi señaló que se debe persistir en una solución favorable al problema y “…en la supresión de los obstáculos que impiden a estas personas regresar a sus hogares”, explicó
En 2018, el 80% de los refugiados vivían en países vecinos a sus lugares de origen, y según ACNUR las naciones más pobres acogen a un tercio de todos los refugiados del mundo.
Lo anterior significa que mientras las naciones de ingresos altos acogen de media a 2.7 refugiados por cada mil habitantes; los de ingresos medios o bajos, a 5.8.
Ademas, de todos los refugiados del mundo, uno de cada dos refugiados era un niño o niña, muchos de ellos se encontraban solos sin su familia, y 4 de cada 5 refugiados habían permanecido en situación de desplazamiento por al menos cinco años, acotó ACNUR.