Diáspora dividida por reelección de Bukele
Por Milagro Orellana
Estados Unidos – El histórico y emblemático Parque MacArthur ubicado en la periferia de la ciudad de Los Angeles, California volvió a ser el escenario donde un grupo de salvadoreños que viven en Estados Unidos se concentró este domingo para apoyar la reelección del actual presidente Nayib Bukele.
Los salvadoreños que viven en distintas áreas de la ciudad angelina gritaban consignas a favor del mandatario, y mostraban con euforia carteles en los que se leía “ahora el régimen de excepción y mañana reelección…”.
El período presidencial de Bukele culminará en 2024, y algunos grupos dentro de la diáspora formado por personas que salieron del país por razones distintas como falta de oportunidad, persecución y violencia, ahora apoyan la posibilidad de una reelección inmediata a pesar que expertos advierten que es inconstitucional, y que la Carta Magna no lo permite bajo ningún punto de vista.
La Constitución de la República de El Salvador es clara y precisa en el Artículo 88 que cita lo siguiente: “La alternabilidad en el ejercicio de la Presidencia de la República es indispensable para el mantenimiento de la forma de gobierno y sistema político establecidos. La violación de esta norma obliga a la insurrección”.
En tanto el Artículo 152 en el inciso 1º es claro cuando establece quienes no podrán ser candidatos a Presidente de la República, “El que haya desempeñado la Presidencia de la República por más de seis meses, consecutivos o no, durante el período inmediato anterior, o dentro de los últimos seis meses anteriores al inicio del período presidencial”.
En este contexto analistas políticos y abogados expertos en materia constitucional han explicado que este proceso no se puede llevar a cabo debido a que la Carta Magna es garante de hacer cumplir el debido proceso, no hacerlo violaría la Constitución de la República.
La situación se ha convertido en una polémica que mantiene dividida a la diáspora, tanto así que en el Parque MacArthur también hubo voces en contra de la reelección de Bukele.
El Salvador atraviesa por una crisis social, económica y política agudizada con la pandemia, aunado a eso el gobierno estableció un régimen de excepción que mantiene sin derechos constitucionales a la población desde marzo pasado, bajo la premisa que sería la forma más efectiva de poner fin a la difícil situación generada por las pandillas, una decisión criticada por organismos internacionales, y que no es avalada por una parte de la población.
En medio del aumento de las críticas, expertos que coinciden en que durante ese período se agudizaron las violaciones a los derechos humanos, lo que produjo otras reacciones como el condicionamiento del fondo de la ayuda internacional por la falta de transparencia en el manejo de estos mismos.
