Por Alberto Barrera
Luego de que el Congreso apoyara por abrumadora mayoría un proyecto de ley que luego firmó el presidente Joe Biden es legislación vigente y los empleados federales tendrán feriado todos los 19 de junio, pero debido a que este año es sábado “el Juneteenth” se adelantó un día la conmemoración.
La razón es porque el 19 de junio de 1865 se conoció el fin de la esclavitud en Texas, dos años y medio después de que el presidente Abraham Lincoln emitiera la Proclamación de Emancipación en septiembre de 1862.
“Todos los esclavos son libres”, dijo el general de división Gordon Granger en Galveston, Texas hace 156 años. Los ricos sureños habían obviado la proclamación de Lincoln y algunos esclavos fueron liberados con la llegada de las tropas de la Unión, pero muchos de ellos fueron retenidos incluso después de la orden de Granger.
«Al hacer de Juneteenth un feriado federal, todos los estadounidenses pueden sentir el poder de este día y aprender de nuestra historia”, dijo Biden luego de firmar el decreto que con poca resistencia fue aprobado por el congreso.
La aprobación en la Cámara de Representantes fue de 415 votos a favor contra solo 14 en contra. Antes el proyecto pasó raudo por el Senado y firmada el jueves por el presidente Biden quien dijo que «espero que este sea el comienzo de un cambio en la forma en que nos tratamos los unos a los otros».
Estados Unidos tiene una historia tumultuosa de racismo que en mayo de 2020 encendió la mecha de protestas con el asesinato de George Floyd, un hombre afroamericano de 46 años en Minneapolis por policías que le tenían controlado por la fuerza y uno de ellos, blanco, le puso la rodilla que le causó la muerte.
El senador Edward J. Markey, demócrata de Massachusetts, aseguró que otorgar el feriado no cambia la historia de retrasos en la libertad de los afroamericanos, luego del fin a la guerra civil y que tampoco “corrige los errores del pasado en nuestra nación, pero finalmente da un reconocimiento y voz a quienes sufrieron”, dijo citado por el Washington Post.
El esfuerzo es considerado por sus promotores con un éxito en los intentos de reconocer las atrocidades de la esclavitud, pero también es una carga histórica larga de racismo que aún se mantiene.
El senador republicano de Texas, John Cornyn, tuvo una destacada participación en lograr el apoyo de su partido para que la ley fuera aprobada. «Creo que no hay mejor momento que el presente, particularmente dada la lucha que hemos visto”, dijo Cornyn.
Pese al apoyo bipartidista muchos reconocer que aún hay un largo trecho a recorrer para aliviar o garantizar el acceso al voto restringido por leyes estatales lideradas por republicanos. También se promueven reformas policiales federales para reducir la brutalidad de las fuerzas del orden público en contra de minorías, sostuvo el Post.