Por Alberto Barrera/Galería: Luis Galdámez
El Salvador – El Día de los Difuntos, para unas familias es de nostalgia, al recordar a sus seres queridos que se adelantaron físicamente, para otras es una fiesta colorida por la memoria de familiares y amigos que reposan en sepulturas sencillas, vistosas o artísticos sarcófagos.
Los cementerios se tornan en centros de reunión de personas que llegan a estar frente a las tumbas de sus deudos, colocan flores, limpian o pintan el lugar y las cruces en los que están sus nombres con fechas del tiempo en que vivieron y partieron.
Las calles aledañas y algunas dentro del mismo camposanto se encuentran ventas de flores y golosinas o comidas típicas propias de la época, como las hojuelas con miel.
Luis Galdámez, experimentado y laureado fotógrafo, captó una serie de fotografías y nos las comparte en esta galería que llamó Entre Flores y Ángeles.
Cementerio La Bermeja de San Salvador, por segundo año consecutivo, las visitas serán restringidas siguiendo los protocolos de bioseguridad por la Covid-19.