
Por Héctor Murcia
El Congreso de los Diputados de España ha aprobado hoy con 202 votos a favor, 141 en contra y dos abstenciones, la Ley Orgánica de regulación de la eutanasia.
Como día histórico han calificados los grupos parlamentarios que defendían la aprobación de la ley propuesta por el PSOE, ya que sitúa a España como el sexto país en legalizar esta práctica, después de Holanda, Bélgica, Luxemburgo, Canadá y Colombia.
Esta ley entrará en vigor dentro de tres meses y la persona que quiera acogerse a ella debe “sufrir una enfermedad grave e incurable o un padecimiento grave, crónico e imposibilitante” que le cause un “sufrimiento físico y psicológico intolerable”.
Con la aprobación de esta ley se regulará la eutanasia y el suicidio asistido. La primera consiste en que un profesional de la salud administre directamente al paciente una sustancia para que fallezca, mientras que el suicidio asistido se refiere a que un profesional de la salud recete o suministre al paciente la sustancia para que pueda auto administrar para causar su propia muerte.
Los solicitantes deberán presentar su solicitud en dos ocasiones por escrito y tras dos procesos deliberativos y si cumplen los requisitos, recibirán la ayuda a morir en torno a 35 días después.
Por su parte, los grupos parlamentarios que votaron en contra, Partido Popular y Vox, advirtieron que esto puede generar “un efecto llamada para las personas más vulnerables”, según el popular José Ignacio Echaniz. Mientras que Lourdes Méndez, de Vox, ha acusado directamente a los proponentes de “implantar la cultura del descarte y la muerte”.