Hospitales de Hong Kong se encuentran al límite por repunte de contagios de Ómicron

Las autoridades no esperaban que la variante Ómicron se multiplicara con tanta facilidad.

Las autoridades sanitarias aíslan a todos los contagios, aunque no presenten síntomas. (Foto: Cortesía).
Redacción Voz de la Diáspora

Hong Kong – Más del 90% de las camas de los hospitales de Hong Kong están ocupadas por pacientes con coronavirus debido al repunte derivado de la circulación de la variante Ómicron, que ha puesto a prueba el sistema sanitario en el territorio.

Después de varios meses sin víctimas provocadas por la infección, la semana pasada, siete personas perdieron la vida. La variante Ómicron hizo que los contagios se multipliquen y que la jefa de gobierno local, Carrie Lam, anuncie nuevas acciones.   “Esta variante ha asestado un duro golpe a Hong Kong y ha hecho que la capacidad de gestión de la ciudad quede sobrepasada”. 

Más de 8 mil casos han sido detectados desde inicios de diciembre a causa de la mutación que afectó a cientos de países en el mundo. Las autoridades advirtieron que el número de casos diarios podría superar los 25 mil en las próximas semanas.

Los hospitales locales registran síntomas leves en la mayoría de pacientes y pidieron a los que no tengan síntomas que se queden en sus casas. Solo un 50% de los residentes de Hong Kong mayores de 70 años han recibido al menos una dosis de la vacuna.

La antigua colonia británica aisla a todas las personas contagiadas aunque no presenten síntomas de la enfermedad, a fin de reducir al máximo su circulación pero esta vez, no ha sido fácil, ya que la variante Ómicron ha demostrado ser altamente contagiosa. Una nueva ola golpeó con fuerza y la nueva cepa tiene al borde del colapso los centros hospitalarios.

La tasa de contagios de coronavirus es inferior a la de otras grandes ciudades del mundo, pero las autoridades no esperaban que la variante Ómicron se multiplicara con tanta facilidad. Este lunes las autoridades reportaron la muerte de dos ancianos.

Hong Kong se sumó a la estrategia “Cero Covid” de China, que consiste en cortar los brotes de coronavirus a través del rastreo de contagio, cuarentenas masivas y aislamientos prolongados para las personas que tuvieron contacto con algún caso.