
Redacción Voz de la Diáspora
La primera dama de Estados Unidos Melania Trump se irá de Washington, D.C., rompiendo nuevamente el protocolo, pero esta vez su gesto no fue bien visto por los especialistas ya que terminó con una tradición no muy común.
La esposa de Donald Trump no invitó a Jill Biden, la primera dama entrante, para hacer un recorrido por la vivienda presidencial, algo que ha sido muy cuestionado por expertos en protocolo presidencial.
Tradicionalmente la invitación de la primera dama a quien ocupará la residencia era una forma de dar la bienvenida y ayudar a establecerse en la zona familiar, sin embargo en la toma de posición pasada, Melania Trump, sí fue invitada a visitar la residencia por Michelle Obama antes de hacer la transición a su residencia privada, cuando terminó su gestión.
La costumbre que no acató la primera dama saliente data de 1950, cuando Bess Truman, esposa del presidente Harry Truman invitó a su entonces sucesora Mamie Eisenhower a la Casa Blanca.
La decisión de Melania de no tener el gesto de hospitalidad con Jill Biden no fue justificada por su equipo de trabajo, sin embargo muchos creen que es obvia tras la polémica salida de Donald Trump.
Así también la toma de posesión será histórica por la ausencia del presidente saliente, las circunstancias del encierro por la Covid-19 con el distanciamiento social y el fuerte despliegue de militares en el Capitolio.