Redacción Voz de la Diáspora
Una investigación ha revelado que más de 400 mercenarios que conforman una milicia privada rusa, conocida como Grupo Wagner, han logrado ingresar a Kiev, capital de Ucrania con la intención de atentar contra la vida del presidente Volodímir Zelenski.
El mandatario ucraniano se ha negado en múltiples ocasiones en abandonar su país y ha manifestado que no teme de los atentados en su contra. Volodímir Zelenski se ha convertido en un héroe nacional por sumarse a la lucha contra la invasión de rusa.
De acuerdo a la información desvelada por el periódico estadounidense The Times, los rusos que buscan al presidente ucraniano, reciben órdenes del presidente ruso Vladimir Putin, quien en repetidas ocasiones ha manifestado su desprecio a su homólogo y ha hecho fuertes señalamientos contra él.
The Times señala que la idea, que surgió desde el Kremlin, sería para dejar acéfalo al gobierno ucraniano e imponer un mandatario afín al gobierno ruso. Los mercenarios trasladados a Ucrania recibirían una alta suma de dinero por concretar el atentado.
El presidente ucraniano ha advertido desde el sábado que existen muchas posibilidades de un atentado en su contra por lo que las medidas para protegerle se han incrementado drásticamente, incluyendo un toque de queda de 36 horas en la que se buscan a los mercenarios rusos.
Las fuerzas militares ucranianas tienen la orden de eliminar a los agentes del Kremlin que sean identificados en el territorio a fin de resguardar la vida de Volodímir Zelenski y el resto de su Gabinete que ha decidido mantenerse en pie.
El ataque se planeó hace semanas
La información proporcionada por una fuente cercana al Grupo Wagner asegura que los atacantes rusos ingresaron a Ucrania a inicios de enero y la cifra podría ser mayor, unos 4 mil hombres tendrían la orden de acabar con la vida de Zelensky.
Según esta misma fuente, Varios de los mercenarios ingresaron desde las regiones fronterizas de Donetsk y Lugansk, mientras que otros 400 llegaron desde Bielorrusia y se dirigieron a la capital para cumplir con la orden del Kremlin.