Redacción Voz de la Diáspora
El presidente panameño José Raúl Mulino, confirmó el jueves que desconocía la magnitud de la transacción de venta realizada entre un grupo liderado por la estadounidense BlackRock y CK Hutchison Honding con sede en Hong Kong cuya filial opera dos puertos ubicados en ambas entradas del Canal de Panamá, y otras 40 instalaciones más alrededor del mundo.
«Fue una transacción, que si bien yo sabía que se estaba conversando, no tenía (o) no tuve conocimiento hasta, creo que fue domingo, o lunes de Carnaval, del tamaño de la transacción que cerraron vendiendo los puertos de Panamá y también otro número muy grande de puertos globalmente de la compañía Hutchison», expresó el mandatario durante su conferencia semanal.

«Nadie lo sabía aquí en Panamá» afirmó Mulino, pero aclaró que tenían conocimiento de que cuatro empresas podían estar interesadas en el caso, una de esas fue la que compitió y se llevó la venta.
«La transacción sobre Panamá es una transacción aparte, hasta donde tengo entendido las otras son juntas o sea, que eso nos permite a nosotros mucha comodidad en la evaluación de la documentación», afirmó Mulino.

Recordó que el acuerdo no fue Panamá Ports, que opera los puertos de Balboa en el pacífico y Cristóbal en el atlántico desde 1997, sino nivel de Holdings, que es la empresa dueña del capital accionario de la compañía, agregó el presidente.
Esperan detalles sobre la transacción
En tanto Mulino dijo que el gobierno espera la documentación para conocer los detalles de la transacción que solicitaron a la empresa a través de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP) bajo cuya coordinación se desarrolla la actividad portuaria en el país.
La AMP fue autorizada por el Ejecutivo para solicitar los documentos finacieros y legales de la operación entre CK Hutchison y el grupo liderado del cual forma parte BlackRock.
Mulino recordó que la solicitud al gerente general de Panamá Ports de toda la información legal, contractual, y financiera de la transacción en sí es vital porque «por ley» el acuerdo tiene que llevar un visto bueno o una aprobación del Órgano Ejecutivo porque se da una transferencia de control en la concesión.
«No conocemos detalles. Eso es una operación comercial», afirmó el mandatario.
Mientras esperan la información solicitada, Mulino pidió a la Contraloría General de la República que avance «con paso redoblado» en la auditoría que realiza a la empresa en conjunto con la Dirección General de Ingresos.
«Tener una auditoría integral tanto de Contraloría sobre la concesión y otra de comportamiento fiscal durante todo el tiempo de la concesión…», concluyó el mandatario.