Por María T. Morales
Texas- EE.UU. – Como parte de la prevención de accidentes en carreteras, las autoridades policiales llamaron la atención a los conductores sobre los riesgos de manejar bajo la influencia del alcohol y otras drogas, aprovechando las celebraciones del Día de Independencia el 4 de Julio, cuando usualmente se incrementan estos casos.
“El alcohol y el asfalto no se mezclan” o “tomar y manejar no vale la pena”, son de de las frases comunes en Texas para advertir que esta combinación traerá desastres y una verdadera pesadilla a quien se atreva a romper la ley.
Las consecuencias como ir a la cárcel, perder trabajo o encontrar otro en un futuro, posibles penalidades criminales, son parte de la verdadera pesadilla a la que se podría enfrentar todo automovilista de ser detectado manejando bajo los efectos del alcohol.
La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en carreteras de los Estados Unidos, en su último informe sobre accidentes de tráfico, muestra que unas 38 mil 824 vidas se perdieron como resultado de choques en carreteras a lo largo de la nación.
La cifra muestra que estas, 11 mil 654 personas murieron a causa de accidentes provocados por conductores ebrios.
En Texas, el costo legal de manejar ebrio ronda los 17 mil dólares, esto sin incluir gastos de restitución, según el departamento de transporte.
Asimismo, si la persona es divorciada y tiene hijos, una condena por conducir ebrio podría afectar derechos de custodia debido a antecedentes penales.
Otras consecuencias son perder licencia comercial de conducir, de medicina, de piloto hasta por dos años, agrega el informe.