La orden establece un plazo hasta el 17 de julio para que ICE libere a los niños, algunos detenidos desde hace casi dos años, cuando intentaban entrar a EE.UU. acompañados de sus padres.
Por María T. Morales
La jueza federal Dolly Gee, en su resolución emitida este viernes establece que niños con más de 20 días de detención en los estados de Texas y Pensilvania, deberán ser puestos en libertad y ser enviados con familiares o patrocinadores en los Estados Unidos.
A estos lugares, llamados Centros de detención Familiar, son enviados padres junto a sus hijos, al ser detenidos por agentes del Centro de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) por siglas en inglés.
La jueza del Distrito Central de California, basó su resolución en el Acuerdo Judicial Flores, estipulado en 1997, por medio del cual se prohíbe al gobierno, mantener niños privados de libertad en cárceles federales.
Diversas organizaciones que velan por los derechos humanos de migrantes, se mostraron optimistas por la resolución judicial.
La jueza también determinó que la amenaza del COVID-19 es uno de los criterios por lo que el gobierno federal debe liberar a los niños y a sus padres. Por lo menos en dos, de los tres centros se han registrado contagios por la pandemia.
En estos centros permanecen unas 1,700 personas desde hace más de dos años, a la espera de audiencias judiciales donde se decidirá sobre peticiones de asilo.