Por María T. Morales
Houston recibirá en las próximas horas los restos de George Floyd, el afroamericano que murió en Minneapolis, a manos de un policía.
Floyd será velado el jueves y su sepelio, se realizará al siguiente día en Houston, la ciudad que le vio nacer y crecer. Pese a lo que esto representa, no habrá toque de queda, ni solicitudes de apoyo para la Guardia Nacional.
La Policía, que ha mostrado su solidaridad con la comunidad de la ciudad, dijo que está en alerta para evitar que grupos violentos, infiltrados entre los manifestantes, actúen.
Desde el sábado, las autoridades policiales de Houston y otras fuerzas del orden comenzaron la tarea de evitar que las manifestaciones, se tornen violentas y terminen en saqueos, destrucción y arrestos, como ocurrió en otras ciudades del país.
Esta semana una autopsia realizada al cadáver de Floyd, determinó que murió por asfixia, causada por la presión en el cuello y en la espalda, que hizo el policía. Su muerte causó el enojo nacional en Estados Unidos.
Miles de personas se volcaron a las calles, pese a las restricciones que se mantienen por el brote de coronavirus y por los toques de queda ordenados en algunas ciudades y estados de la unión americana.
Por lo menos, unas 60 mil personas, entre ellas miles de latinoamericanos, se concentran en las calles para demandar justicia y el cese a la brutalidad policial en el país. Esta manifestación fue convocada por la familia de Floyd, en Houston.
Policías solidarios
La tolerancia de la Policía fue puesta a prueba cuando, en medio de la concentración, que se realizaba sobre la avenida Las Américas y el parque Discovery Green, hasta llegar al edificio de la alcaldía, en el centro de la ciudad espacial, un grupo de manifestantes tiró objetos, botellas de agua a un contingente policial.
Esta acción fue paralizada al instante, ya que manifestantes exigieron no violencia, tal como familiares de Floyd pidieron en repetidas ocasiones, desde que han comenzado las manifestaciones a escala nacional.
El alcalde la ciudad Silvester Turner, quien ha participado activamente con la familia de la víctima, en la organización de las honras fúnebres, dijo que los manifestantes deben estar seguros que sus demandas son escuchadas y que la muerte de Floyd no será en vano.
En la actividad participaron líderes comunitarios defensores de los derechos de las minorías, la congresista Sheila Jackson Lee, estudiantes y autoridades locales que, junto a policías, dedicaron 30 segundos de silencio para honrar la memoria de Floyd.
Funeral y COVID-19
El sepelio se realizará el 8 de junio desde el mediodía hasta las 6:00 p.m. en la Fountain of Praise Church, ubicada en el 13950 Hillcroft Ave., en el centro de la ciudad de Houston.
Trascendió que la estrella de boxeo Floyd Mayweather anuncio que correrá con los gastos del funeral de Floyd, que se desarrollará el viernes 9 de junio, en un lugar, aun desconocido, con la presencia solo de familiares cercanos en cumplimiento a las medidas de protección para evitar la propagación de la pandemia del COVID-19.
Sin embargo, expertos han señalado que las manifestaciones masivas podrían generar un rebrote del virus por la dificultad de mantener los seis pies de distanciamiento social, sumado a que miles de manifestantes tampoco utilizan cubrebocas o mascarillas.
Texas se cuida solo, dice Gobernador Abbott
El gobernador Gregg Abbott ha dicho que la violencia y el vandalismo no tienen lugar en Dallas Fort Worth, ni en ningún lugar de Texas.
El gobernador de Texas dijo que hay razón para estar enojados, «pero que cada persona tiene derecho de hacer escuchar su voz, de protestar contra la injusticia».
Aunque el presidente Donald Trump ha dicho que enviará a la guardia nacional para controlar posibles brotes de violencia, el jefe estatal ha expresado que no pedirá ayuda federal porque los tejanos se pueden cuidar entre ellos mismos, y que la muerte de George Floyd debe enfrentarse con protestas pacíficas.
