Redacción Voz de la Diáspora
Panamá – Los menores migrantes que atravesaron las peligrosas selvas de Darién en la frontera entre Panamá y Colombia en su mayoría en ruta hacia Estados Unidos, alcanzaron los 120 mil en los últimos cuatro años, informó el Ministerio de Seguridad (MINSEG).
Durante ese período se movilizaron 612,705 personas por la zona procedentes de Suramérica, de esas alrededor del 20% fueron menores forzados a migrar de sus países, según cifras del Servicio Nacional de Migración citadas por el MINSEG.
“Hay mucha preocupación porque son niños migrantes de su entorno social y sacados de sus escuelas para hacer una travesía peligrosa, en donde quedan expuestos a grupos criminales”, afirmó el ministro de Seguridad de Panamá, Juan Pino.
En los últimos años Panamá ha enfrentado una escalada de personas migrantes que arriban al país a través de la selva en tránsito por la región con la meta de llegar a Estados Unidos, lo que ha obligado al país a pedir ayuda de sus vecinos del área para atender la problemática.
En lo que va de 2023 más de 40,458 pequeños migrantes (21,135 niños, y 19,323 niñas) han pasado por la selva exponiéndose a los peligros, ríos caudalosos, lomas empinadas, barrancos y al hábitat de jaguares peligrosos y serpientes venenosas, afirmó el MINSEG.
En el primer semestre de este año más de 200,000 personas han atravesado el “Tapón del Darién”, una cifra record comparada con el mismo lapso de 2022 que cerró con poco más de 248,000, según Migración.
La directora de Migración, Samira Gozaine se lamentó que algunos de los pequeños no han estado en un centro educativo desde hace años, y que a lo largo del trayecto, son víctimas de delitos contra su integridad, sufren las inclemencias del tiempo, pasan hambre, frío, tienen miedo, y hasta son separados de sus padres en su paso por la selva.
Gozaine que señaló durante meses han registrado una “dura realidad testimonial” de personas que aseguran haber encontrado niños abandonados, y otros junto al cadáver de sus madres.
“No cabe duda, de todos estos testimonios que hemos recogido, el crimen organizado es el único beneficiado, y fomenta la migración irregular por la selva de Darién y por otros trayectos”, sostuvo Gozaine.
Recordó que “Panamá no genera la migración irregular ni es partícipe de ésta” sin embargo mantendrá el compromiso de dar un trato humanitario a quienes están dentro de las fronteras del país, mientras “buscamos medios alternos, para que estas personas puedan llegar a donde quieren ir, pero de una forma segura y digna”, agregó.
El gobierno panameño ha lanzado una campaña a través de la cual envía un mensaje a las personas migrantes que advierte que “Darién no es una ruta”, de hecho el llamado “Tapón del Darién es considerada como la zona más inhóspita e intransitable de Latinoamérica.
