Redacción Voz de la Diáspora
Panamá – El Canal de Panamá, una de las principales rutas del comercio mundial, reafirmó su compromiso de trabajar en la sostenibilidad de la industria marítima y apoyar las estrategias para lograr cero emisiones de carbono, tras firmar un acuerdo como Embajador de Misión del Fonden Mærsk Mc-Kinney Møller Center.
La alianza pactada entre la vía interoceánica panameña y el centro, que es reconocido por sus aportes a la descarbonización del sector marítimo, complementa la estrategia de sostenibilidad ambiental del Canal.
«Estamos firmando un acuerdo que nos convierte en Embajadores de Misión, un nivel que va más allá de simplemente colaborar en el corredor verde», afirmó la subadministradora y oficial de Sostenibilidad del Canal, de Ilya Espino.
Como Embajador de Misión, el Canal se convierte en parte de la cadena de valor principal del transporte marítimo, aportando competencias, capacidades, recursos y activos relevantes para los proyectos del Centro. Ambas organizaciones se comprometen con apoyar esta iniciativa y aportar con la misión de descarbonizar la industria marítima global.
El Canal de Panamá por donde transita alrededor del 5% del comercio mundial, es considerado una ruta verde que conecta Asia y la costa este de Estados Unidos, entre otras ventajas porque es más corta comparada con otras, ofrece incentivos a los barcos para que reduzcan sus emisiones, y refuerza su estrategia para conservar la cuenca en momentos en que se profundizan los desafíos del cambio climático con sequías más frecuentes.
El paso marítimo no solo produce agua para unos 13,000 tránsitos al año, sino también debe asegurar agua para consumo humano para más de la mitad de los 4.5 millones de habitantes.
En el último año fiscal, que terminó en septiembre, el Canal se vio obligado a establecer medidas estrictas para ahorrar agua así como restringir los tránsitos a niveles históricos debido a la sequía que afectó al país, mientras busca alternativas para garantizar el recurso a largo plazo que incluye la construcción de un reserborio multipropósitos en el llamado río Indio que podría llevar almenos seis años de construcción.
«El Canal de Panamá representa una parte central del ecosistema global de transporte marítimo. Trabajar con el Canal es fundamental para acelerar la descarbonización», explicó Pernille Dahlgaard, directora de Negocios Gubernamentales y Análisis del Centro Maersk Mc-Kinney Møller.
El Fonden Mærsk Mc-Kinney Møller Center es una fundación independiente cuyo propósito principal es operar un centro global de investigación que contribuya con la innovación y desarrollo de tecnologías para descarbonizar la industria marítima.
También trabaja en el establecimiento de una plataforma abierta y neutral para la colaboración interdisciplinaria, con el objetivo de convertirse en un motor de cambio visible a nivel mundial en la transición hacia una industria marítima libre de carbono.