
Por María T. Morales
Una tormenta gélida que se propaga a lo largo y ancho de los Estados Unidos ha dejado muertos, a millones sin energía eléctrica y decenas de accidentes en carreteras debido al hielo, nieve y agua nieve que no cesa desde hace cuatro días en algunos estados.
El presidente Joe Biden declaró alerta nacional para los estados que se encuentran bajo el clima extremo, con el fin de agilizar ayuda federal.
La acumulación de hielo en las autopistas ya provocó accidentes, cobrando la vida de al menos seis personas.
El Centro de Predicciones Meteorológicas advirtió hoy que la gran tormenta de invierno esparcirá fuertes nevadas y una cantidad significativa de hielo, acumulaciones desde los valles de Tennessee, Ohio hasta el noreste.
Para Georgia y La Florida se esperan tormentas eléctricas severas, lluvias intensas y temperaturas cálidas.
Sobre las montañas de noroeste del pacífico y las montañas Rocosas del norte se esperan de 1 a 2 pies de nieve, y hasta el miércoles podrían alcanzar de 2 a 4 pies.
La lluvia helada impactará una franja aérea que se extiende desde el este de Texas hasta el suroeste de Tennessee el martes por la noche.
El frío extremo en Texas, donde comúnmente no cae nieve, alertó a las autoridades locales por lo que abrieron al menos 9 refugios para personas sin hogar y llamaron a la población a quedarse en casa.
El servicio de autobuses y metro, clínicas, centros de pruebas de COVID-19 así como centros de vacunación permanecerán cerrados hasta nuevo aviso.
En tanto, decenas de distritos escolares también cancelaron clases tanto virtuales como presenciales.
“El impactante clima invernal continuará de costa a costa”, advirtieron las autoridades quienes además hicieron el llamado a la población a no salir de sus casas a menos que sea por emergencia.
