“Código de las familias”: Cuba lleva el matrimonio igualitario a controvertido referéndum este domingo

Cuba lleva a referendo este domingo, 25 de septiembre el Código de las familias, un paquete legislativo que incluye el matrimonio igualitario y la gestación subrogada, en una votación inusual, controvertida y de resultado incierto.

Redacción Voz de la Diáspora

Cuba – La Comisión Electoral Nacional (CEN) de Cuba asegura que todo está preparado para el buen desarrollo de la consulta. Más de ocho millones de cubanos están llamados a las urnas en unos 24.000 colegios electorales.

Cuba lleva a referendo este domingo, 25 de septiembre el Código de las familias, un paquete legislativo que incluye el matrimonio igualitario y la gestación subrogada, en una votación inusual, controvertida y de resultado incierto.

El texto, que sustituye a una normativa de 1975, contempla el matrimonio entre personas del mismo sexo y la posibilidad de que adopten.

La norma regula además el embarazo “solidario”, la responsabilidad de los progenitores con sus hijos y el cuidado de las personas mayores. Esto, además de prohibir el matrimonio infantil y abordar la violencia de género.

El Gobierno cubano y todas las estructuras del Estado se han volcado en la campaña por el “sí”, incluida la Comisión Electoral Nacional (CEN) y el Tribunal Supremo, con continuos mensajes desde hace semanas en medios oficiales y redes sociales.

Argumentan que el código atiende a la realidad actual de las familias cubanas, amplía derechos y protege mejor a menores, mayores, personas con discapacidad y colectivos vulnerables.

El “no”, por su parte, no ha tenido una campaña articulada ni presencia en los medios oficiales. En redes sociales activistas y algunas instituciones y colectivos han abogado por la abstención o el rechazo a la ley.

Su oposición es en ocasiones rechazo al contenido, y particularmente a que los homosexuales puedan casarse y adoptar. Éste es el caso de la Iglesia católica, que recientemente criticó en un comunicado de la Conferencia Episcopal estos puntos y pidió votar “en conciencia”.

Foto ilustrativa – cortesía

Pero el rechazo es también político. Opositores, disidentes y activistas aseguran que se abstendrán o votarán en contra porque consideran que el “sí” conlleva la legitimación del sistema político comunista con el que no están de acuerdo.

La opositora y exprisionera política cubana Marta Beatriz Roque explicó que si pudiera votar -tiene los derechos civiles suspendidos por una condena- optaría por la abstención.

“Yo no estoy ni por el sí ni por el no, ni por nada, porque conozco la dictadura, se cómo trabaja y estoy convencida de que en estos momentos ya se sabe lo que va a ser el resultado de este plebiscito”, sostiene.

Algunas ONG han destacado las dudas que les suscita esta consulta, como es el caso de Transparencia Electoral.

Su director, Leandro Querido, criticó en una entrevista que se ha tratado de una campaña sin “garantías”. Agregó que la jornada electoral no cuenta con observadores internacionales y que, sin “controles cruzados”, los resultados serán “inverificables”.

El ejercicio pretende ser el punto y final de un proceso de años. Arrancó con la elaboración de la Constitución de 2019 y concluyó con la aprobación de la vigésimo quinta versión del Código de las Familias en la Asamblea Nacional (parlamento unicameral) en el mes de julio, luego de tres meses de consulta popular y 79.000 reuniones con ciudadanos en barrios y municipios.