
Por Luis Alberto López
El Salvador – Los residuos plásticos no solo están contaminando la tierra y los océanos, sino también el cuerpo de los animales y los seres humanos.
Cada semana nuestro cuerpo podría estar consumiendo unos cinco gramos de partículas de desechos plásticos, el equivalente a una tarjeta de crédito, cuando comemos productos marinos, alimentos empaquetados o embotellados que contienen y desprenden este material.
Los animales marinos también son víctimas de la ingesta de este derivado del petróleo, tras recibir en su ecosistema desechos plásticos fabricados por la industria, utilizado por humanos y botados a los basureros que sin tratamiento son arrastrados por aguas lluvias a los lagos, ríos y finalmente al océano.
En el año 2050 habrá más plástico que peces en los mares y océanos. Se calcula que cada segundo se vierten 200 toneladas de plástico a los fondos marinos.
De acuerdo a datos de Naciones Unidas, desde 1950 al 2017 se han fabricado 9.2 mil millones de toneladas de plástico en todo el mundo, lo que ha generado un alarmante y creciente problema de contaminación en el planeta, especialmente la utilización del plástico de un solo uso.
Esta preocupación la expresan alcaldes, organizaciones de la sociedad civil y organismos internacionales que conformamos la Red Trinacional por el Rescate del río Lempa, de Guatemala, Honduras y El Salvador de la Mancomunidad Trinacional Fronteriza Río Lempa, quienes participaron en un foro realizado en San Salvador denominado “Frenando la marea de los plásticos”.
En una declaración pública demandaron tomar acciones a los gobiernos nacionales, locales y asambleas para frenar el avance de la contaminación por plástico, ya que lo consideran un problema de Derechos Humanos.
Prohibir el uso del plástico de un solo uso, fomentar la utilización del depósito de vidrio retornable, mayor educación y sensibilización son algunas de las propuestas que serán presentadas a las respectivas autoridades de cada país.