
Redacción Voz de la Diáspora
El expresidente de Perú, Alan García, murió este miércoles, luego de darse un tiro en la cabeza cuando la policía de su país llegó a su residencia para arrestarlo. El exmandatario tenía orden de detención provisional por una investigación por corrupción, vinculada a un caso de Odebrecht.
En una conferencia de prensa que dieron las autoridades del hospital donde ingresó García, se informó que el expresidente tuvo tres paros cardiorespiratorios mientras era intervenido en urgencias.
Los primeros reportes, indican que García se disparó en la cabeza al saber que la policía llegó a su casa con una orden de detención por diez días, que giró el Poder Judicial. García tenía además, una restricción para salir del país, por el mismo caso.
Fuentes médicas consultadas por la agencia de noticias EFE, dijeron que García, de 69 años, ingresó al hospital Casimiro Ullóa de la capital peruana, Lima, con un traumatismo en el lado derecho de la cabeza, causado por arma de fuego.
Además de la detención del expresidente, las autoridades peruanas ordenaron también la detención del exsecretario de la presidencia, Luis Nava, y de Miguel Atala, colaborador del gobierno de García. Ambos son señalados, por ser supuestos testaferros del expresidente.