Redacción Voz de la Diáspora
El Salvador – En el informe final de la primera revisión al programa de Servicio Ampliado (SAF) publicado el martes 16 de julio, el Fondo Monetario Internacional (FMI) recomienda al gobierno de El Salvador considerar ajustes en su régimen impositivo si no se alcanzan las metas de recaudación establecidas bajo el programa de ajuste fiscal acordado entre ambas partes.
El acuerdo, firmado en diciembre de 2024, permite al país acceder a $1,400 millones y exige un ajuste fiscal del 3.5% del PIB en un plazo de 40 meses para estabilizar las finanzas públicas. En la primera revisión al cumplimiento de este acuerdo, el FMI reconoció que El Salvador ha logrado avances satisfactorios en la mayoría de compromisos, aunque persisten algunos retrasos. Entre las medidas de contingencia sugeridas se encuentran optimizar aún más el gasto no prioritario y ampliar la base impositiva, así como racionalizar regímenes fiscales especiales y aumentar tasas de impuestos en caso de que los ingresos no sean suficientes.
Entre las opciones concretas propuestas por el FMI destacan la creación de una tarifa de entrada turística de $20 para no residentes, el aumento de impuestos especiales al tabaco y bebidas alcohólicas, un mayor cobro por registro de vehículos y la ampliación de los impuestos sobre la renta y el IVA, incluso considerando el IVA sobre el consumo de combustible y sobre servicios digitales. También se propone un impuesto verde al carbono, aumentar el impuesto a las ganancias de capital y elevar el impuesto a los dividendos distribuidos.
El economista Rafael Lemus señaló, en una entrevista a LPG, que estas medidas son recomendaciones de contingencia y no se aplicarían de forma inmediata, ya que la recaudación fiscal ha tenido un buen desempeño y ha superado las metas presupuestadas en 2024. Sin embargo, Lemus considera que medidas como la factura electrónica y la inclusión del IVA en los servicios digitales son más relevantes y efectivas para aumentar la recaudación que otras propuestas como el cobro a turistas o el registro de vehículos.
El gobierno salvadoreño se ha comprometido ante el FMI a fortalecer la recaudación mediante la ampliación de la factura electrónica y la simplificación de trámites tributarios, además de mejorar la fiscalización y el intercambio de datos. El FMI insiste en que el cumplimiento de las metas fiscales es clave para mantener la credibilidad y la sostenibilidad financiera del país, por lo que continuará monitoreando el desempeño y la implementación de posibles medidas adicionales en caso de ser necesarias.