Por María T. Morales
El Salvador – Aperados con horcones y un par de láminas, habitantes de la comunidad Pedro Diaz, en San Francisco Morazán, Chalatenango, comenzaron a construir una galera donde sus niños iniciarán el año lectivo 2024, ante la falta de respuesta del Ministerio de Educación, según padres de familia.
Aunque la comunidad, tiene maestros asignados, desde jardín de infancia hasta sexto grado, además de un terreno donado por un miembro de la comunidad, unos 29 niños no tienen un lugar digno donde estudiar y ‘temporalmente’ estudian en un predio de la ermita de la zona.
“Cuando llueve los niños se mojan, cuando hace calor, se desesperan y el polvo hace que los niños se enfermen” dijo una fuente de la comunidad consultada.
Hace más de dos años, apoyados por la organización Comunidades de Fe Organizadas en Acción (COFOA) según recuerdan los habitantes, llegaron hasta la capital salvadoreña y tras reunirse con el ministro, este prometió la construcción de la escuela.
En esa ocasión, los lugareños que ya estaban listos para construir la galera, recuerdan que confiaron en la palabra del funcionario y desistieron de la obra; el tiempo pasó, y ni las autoridades locales de educación de Chalatenango ni el ministro, han dado una respuesta a los líderes.