Por Oscar Vigil
Toronto, Canadá. Los solicitantes de refugio que están llegando a la provincia de Ontario ya pueden respirar con más tranquilidad. Luego de los recortes hechos por el conservador Premier de la provincia, Doug Ford, a las clínicas de asistencia legal (Legal Aid Ontario, LAO), el gobierno federal liberal se comprometió esta semana a llenar ese vacío financiero.
El Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunció que el gobierno federal aportará 26 millones de dólares para resolver en parte los problemas económicos que Legal Aid Ontario está enfrentando para atender a los solicitantes de refugio y a los nuevos inmigrantes, luego que el gobierno conservador de Ontario recortara el 30 por ciento del presupuesto de la entidad.
«Hay políticos conservadores (que) siguen intentando hacernos retroceder y hacer que los más vulnerables sufran por las decisiones que toman. A los políticos conservadores les gusta decir que son para la gente, pero terminan recortando servicios para los más vulnerables. Eso es lo que hacen», dijo el Primer Ministro, en las oficinas de una organización comunitaria en Toronto.
Por su parte, Arif Virani, Secretario Parlamentario del Ministro de Justicia de Canadá, dijo que estaba «horrorizado» por los recortes que el Premier Doug Ford hizo a las clínicas de asistencia legal de la provincia.
«Los encontré indefendibles, indefendibles desde una perspectiva económica, indefendibles desde una perspectiva basada en la evidencia, indefendibles desde una perspectiva ética», explicó.
El pasado mes de abril se conoció que las clínicas de asistencia legal de Ontario ya no brindarían más ayuda legal gratuita a los nuevos inmigrantes y a los refugiados, luego que el gobierno conservador del Premier Doug Ford anunciara un recorte del 30% del presupuesto a dicha institución. Dicho recorte significó que LAO recibiría $133 millones menos en este año fiscal.
Dicho recorte, explicaron los funcionarios de la entidad, afectaría gravemente a los recién llegados dado que significaba que los abogados de la agencia dejarían de aceptar a la mayoría de nuevos clientes, inmigrantes y refugiados, a partir de ese mismo mes.
Agregaron que la provincia le dijo a la agencia que únicamente podían usar fondos federales para cubrir los servicios para los nuevos inmigrantes y refugiados este año, pero no fondos provinciales.
La financiación federal totalizaba entre $13 millones y $16.5 millones, lo que es menos que los costos proyectados de Legal Aid Ontario de entre $30 millones y $34 millones en los servicios para dicho sector en el año.
Ahora, los fondos anunciados por el gobierno federal vienen a llenar ese déficit. La mayor parte de los fondos anunciados irán a Ontario ($25.7 millones), con fondos adicionales para British Columbia ($1.16 millones) y Manitoba ($20,000). Estas cantidades se suman a los $49.6 millones para tres años anunciados previamente en el presupuesto federal de este año para asistencia legal de inmigración y refugio.
El anuncio del Primer Ministro Justin Trudeau se da a escasas 10 semanas de las elecciones federales, durante una campaña política en la que el Partido Liberal se ha esforzado en vincular al líder del Partido Conservador Federal, Andrew Scheer, con las políticas de recortes realizadas por el Premier de Ontario, el también conservador Doug Ford, que lo han llevado a una estrepitosa caída de popularidad.
Vilma Filici, profesora de leyes de inmigración de Seneca College, dice que de acuerdo con la posición que tiene actualmente el gobierno liberal, y la que ha tenido siempre el gobierno canadiense con los expatriados del mundo, era lógico que el actual Primer Ministro asumiera la responsabilidad de pagar la asistencia legal de los refugiados e inmigrantes que la requieran.
“Me parece justo, me parece correcto, y a su vez me parece peligroso para el gobierno liberal en este momento el haber tomado esta decisión y haber hecho este anuncio, ya que la opinión publica en cuanto a los refugiados y a las personas que requieren asistencia no es muy favorable. Pero en términos de justicia me parece que es lo que se tenía que hacer, porque después de todo, estas son las personas más vulnerables que tenemos en la sociedad”, explicó.
Dijo que el hacer una solicitud de refugio en Canadá no es simplemente de llegar y contar una historia, sino que la persona interesada debe asegurarse de que la presentación del caso se ajuste a la definición de lo que es un refugiado o de lo que es una persona que necesita protección, “y una persona sin preparación legal no puede saber qué es lo que tiene que presentar y cuáles son los factores que tiene que demostrar al presentar su evidencia”.
Por su parte, los abogados que trabajan los temas de refugio también aplaudieron la decisión del gobierno federal de destinar $26 millones a los servicios de asistencia legal para los refugiados y para los recién llegados de Ontario.
«Creo que esto es un gran paso en la dirección correcta», dijo Erin Simpson, ejecutiva de la Canadian Asociación of Refugee Lawyers (Asociación Canadiense de Abogados de Refugio).
Igual posición tomó el Presidente de la Canadian Bar Association (Asociación de Abogados Canadienses), Ray Adlington, quien dijo que «este dinero, junto con la financiación asignada en el presupuesto federal para asistencia legal para inmigrantes y refugiados, es un compromiso necesario si Canadá quiere seguir llamándose un país humanitario, fundado en el estado de derecho».