Representantes de la comunidad Santa Marta, durante una manifestación para pedir la libertad de los líderes comunitarios detenidos
Foto: Facebook ADES Santa Marta
Voz de la Diáspora
El Salvador – Tras unas tres horas de deliberaciones, el Juzgado de Primera Instancia de Sensuntepeque, Cabañas, rechazó la petición de revertir la detención provisional de los líderes comunitarios del cantón Santa Marta y de la Asociación de Desarrollo Económico Social Santa Marta (ADES).
Según la revisión de medidas hechas por el Juzgado, podría existir riesgo de fuga.
Sin embargo, a través de un comunicado dado a conocer por los abogados de los encarcelados, esta posibilidad es fácilmente descartable debido a la avanzada edad de algunos de los detenidos, así como los problemas de salud que presentan.
Diferentes personas que están vinculadas con la defensa de los procesados, como el abogado Denis Muñoz, han señalado en varias oportunidades los “serios vacíos” en cuanto al sustento del caso.
Por ejemplo, señalan, el procedimiento no está llevando un trato apegado al derecho y que La Fiscalía General de la República, entre otras cosas, incumplió las 72 horas que manda el debido proceso para la audiencia inicial.
De igual manera, El Diario Co-Latino, recoge en una publicación del 09 de febrero, que Vidalina Morales, como parte de la comunidad Santa Marta, criticó el traslado del proceso judicial a San Salvador cuando le corresponde al Juzgado de Sensuntepeque, Cabañas. “Hay rumores que este caso lo han pasado a San Salvador, por seguridad -dicen- cuando somos una comunidad de bien, una comunidad histórica, que luchamos por lo que es digno, por mejorar las condiciones de vida, por la justicia… esa es la la comunidad Santa Marta”, manifestó Morales, al medio impreso.
El 11 de enero miembros de la Fiscalía General de la República (FGR), junto a elementos de la Policía Nacional Civil (PNC), realizaron la detención de: Antonio Pacheco y Saúl Rivas, directivos de ADES, así como de los líderes comunitarios Pedro Antonio Rivas, Alejandro Laínez y Miguel Gámez.
