Por Voz de la Diáspora
Panamá – Los gobiernos de Estados Unidos y Colombia avanzan en la implementación de un nuevo modelo para atender de manera integral la creciente problemática de la migración irregular en el continente, que implicaría entre otros esfuerzos establecer nuevas vías legales para los migrantes que cruzan las selvas peligrosas del Tapón del Darién.
La estrategia es parte de los acuerdos pactados en abril pasado durante una reunión tripartita en la que participó también Panamá sobre seguridad fronteriza, su realidad y las dificultades migratorias que ocurren en la zona del Darién en la frontera con Colombia, explicó el Departamento de Estado de los EE.UU. en un comunicado.
Durante el encuentro, los tres países reafirmaron el compromiso de ejecutar acciones coordinadas para atender la situación humanitaria en la zona selvática que cada año recorren miles de migrantes provenientes del sur en ruta, en su mayoría hacia Estados Unidos.
El acuerdo prioriza el combate de las redes de tráfico y trata de personas en el Darién en corredores terrestres y marítimos, además de lanzar un plan para reducir la pobreza, mejorar la prestación de servicios públicos, crear empleos y promover oportunidades económicas sostenibles para las comunidades fronterizas en el norte de Colombia y Panamá.
Más reciente el gobierno estadounidense ha propuesto la creación de Puntos de Movilidad Segura (Safe Mobility Offices) que tendrían como objeto identificar, registrar y conocer los motivos de la migración irregular y dirigirla por rutas legales partiendo desde Colombia a los Estados Unidos.
«Se trata de prevenir riesgos a quienes pretenden iniciar o continuar esa migración irregular hacia los Estados Unidos u otros lugares como Canadá. Dichos centros se prevén para varios países de la región», según el comunicado oficial.
Los llamados «Puntos de Movilidad Segura» se establecerán en los próximos días en Colombia, y tendrán un manejo conjunto.
«Este modelo podría ponerse en marcha conduciendo migrantes de Haiti, Cuba y Venezuela hacia rutas legales», explicó el comunicado que ubica la iniciativa dentro del tenor de la declaración sobre Migración y Protección acordada en la Cumbre de las Américas en Los Ángeles, California, el 10 de junio de 2022.
Mientras los dos países instan a las personas que buscan viajar al norte del continente a «que aprovechen las vías legales ampliadas», el gobierno estadounidense también recordó su compromiso de expandir de forma simultánea vías legales adicionales para colombianos con visas de trabajo temporales, y reunificación familiar ampliada.
Por otro lado, Panamá incrementó la seguridad en la zona fronteriza con Colombia, y se vio obligado a pedir ayuda regional para enfrentar la escalada migratoria sin precedentes que se mueve a través del Tapón del Darién donde los migrantes se exponen a bandas de traficantes de personas, y los peligros de la selva.
En 2022 un récord de 248 000 personas, en su mayoría venezolanos usaron la ruta, de esos alrededores del 16 por ciento fueron menores de edad, según el Servicio Nacional de Migración de Panamá.
En lo que va de 2023 más de 166,000 personas han cruzado la selva, y de continuar la tendencia, los expertos temen que el año cierre con una nueva cifra histórica.