Voz de la Diáspora
Alrededor de 1,4 millones de menores han sido afectados por los terremotos que devastaron Turquía y Siria a principios de la semana, mientras que las temperaturas bajo cero aunado a los daños en carreteras y aeropuertos ha dificultado la llegada de la ayuda humanitaria, tras la catástrofe, dijo Save the Children.
La organización recordó que en general los terremotos impactaron a un aproximado de 23 millones de personas entre ellos niños, niñas y adolescentes, y que los supervivientes de ambos países necesitan ayuda de manera urgente.
“La ventana de tiempo para conseguir refugio, suministros médicos, agua y alimentos para salvar vidas en las zonas más afectadas se está cerrando rápidamente”, afirmó Save the Children.
Agregó que las primeras 72 horas luego de una catástrofe natural son críticas, y que por las condiciones climáticas y de infraestructura en Turquía y Siria “se acaba el tiempo para rescatar a los supervivientes”, sobretodo a los menores de edad que son los más vulnerables a las gélidas temperaturas.
Hasta el miércoles los fallecidos a causa de los dos terremotos superaron las 12,000 personas en ambos países, y miles más están heridos, y desaparecidos.
Según cifras preliminares unos 5,775 edificios se derrumbaron en 10 ciudades turcas, pero la catástrofe no solo destruyó viviendas sino que desencadenó distintas emergencias relacionadas con el acceso a la calefacción, electricidad, agua potable y los servicios de comunicación.
Miles de damnificados se han refugiado en contenedores prefabricados donde hay más de 20 niños, niñas y sus familias que necesitan ayuda, según explicó Save the Children.
Después de la tragedia también hay preocupación porque se profundice la crisis humanitaria en la zona, entre millones de personas que viven en campos de refugiados en el noroeste de Siria tras casi 12 años de conflicto.
Se estima que hay casi 3 millones de personas desplazadas internamente en el noroeste de Siria, mientras que 1,8 millones viven en campamentos en la zona afectada por los terremotos, afirmó la organización.
Save the Children informó que ha puesto en marcha una respuesta humanitaria para ayudar a la población de las regiones afectadas, ya que los supervivientes necesitan “desesperadamente” asistencia desde refugio, y mantas hasta alimentos y tratamiento médico.