Colaboración del analista político Juan Carlos Rodas del Castillo
Opinión – En Europa soplan vientos de cambio, está llegando a su fin el romance no muy encarnado que tuvo la izquierda con los europeos, a hoy muchos países de ese continente decidieron virar a la derecha, el detonante fue la vivencia diaria que su población pasa con la influencia rusa y por último la guerra ruso ucraniana, les desencantó los fines izquierdistas, las formas de llevar su doctrina a otros países y los resultados en la población influenciada.
En nuestra América morena está pasando algo similar con el socialismo del siglo XXI del Foro de San Pablo o de Puebla, está desencantando esa izquierda de rematicos y soñadores utópicos del pasado como el Che y Fidel, hoy escasamente conquistan corazones, hoy manda el estómago y la necesidades de superación, aunque sus admiradores los siguen utilizando como carnada que lleva el flautista a sus seguidores al precipicio de más hambre e ignorancia, a solo estirar la mano por bonos y dadivas, cerrándoles el camino a obtenerlos mediante el trabajo, en Cuba, “hoy ya no es patria o muerte”, ahora su población grita “patria y vida”; también en nuestra América soplan vientos de cambio, vientos hacia la derecha, hay cansancio en las poblaciones con tantas promesas incumplidas, cansancio de ver como las cúpulas de gobierno se enriquecen de manera desmesurada por medios reñidos con la honradez y las buenas costumbres, enriquecidos no por el trabajo honrado, sino fruto de la corrupción, cansados sobre como conducen los destinos de nuestros países y el destino de su gente, esto afecta el estómago además de ver el futuro incierto con escasas esperanzas que esto vaya a mejorar en los años, cansados de cómo sus gobernantes enarbolando banderas en nombre de los más pobres, desposeídos e indígenas, mediante triquiñuelas legales y falsos derechos se aferran y buscan extenderse en el gobierno más allá de lo que dicen las constituciones con el solo fin de mantener sus privilegios y formas fáciles de hacerse riqueza mal habida para sí y sus partidarios, cansados sobre las políticas económicas que implementan, que no son visionarias, son fruto de la falta de preparación académica e improvisaciones sin ninguna planificación seria de desarrollo, los resultados no son nada acertados para elevar el nivel de vida, ingresos, salud, empleo digno y bien estar de la población; posiblemente las doctrinas marxistas nacieron con muy buenas intenciones, pero sus ideólogos nunca pensaron ¿o sí lo hicieron?, en el resultado desastroso que conllevaría en los estados más pobres y subdesarrollados cuando esta es aplicada, o lo que tiene en mente el ser humano, por naturaleza tienen o adquiere ambiciones a veces desmedidas de poder sobre los demás, ambición de obtener riqueza a expensas de sus semejantes o su mismo pueblo, peor aún si los que la implementan y ejecutan son escasamente preparados académicamente o no cursaron aulas universitarias, además de no hacerlo con visión de país, sino con visión de beneficio propio, de beneficio para un sector, para los de su partido político, allegados familiares y amigos, entonces, los resultados se los vive tal como está pasando en Venezuela, en Cuba, en Nicaragua y en la Argentina, país ultimo que decidió cambia de rumbo por problemas muy similares a los nuestros.
En Bolivia, en nuestro país, urge cambiar de timón el modelo económico de los Kirchener, Correa, Fidel, Maduro u Ortega, va muriendo a medida que pasan los días, a medida que vamos sintiendo que el dinero alcanza cada vez menos, cuando las amas de casa con técnicas financieras básicas miden con exactitud la inflación y el Índice de Precios al Consumidor sentidos en la mesa y el día a día en los hogares, miden mejor que los gobiernos con sus computadoras de última generación y calculadoras sofisticadas.
En casa educamos a los hijos, mas el gobierno no está exento de esta responsabilidad, pues es quien debe dar seguridad a los padres, con trabajo, salud y acceso a bienes y servicios para una buena estabilidad en los hogares; el gobierno da las directrices en las escuelas, con las universidades no existe ninguna planificación conjunta; algunos ciudadanos escogieron guiar el país desde puestos gubernamentales, parlamento y entes estatales, si hubiera un correcto crecimiento natural en su formación seguramente se tendría países bien gobernados con resultados óptimos o casi óptimos, empero, si no son bien formados o no son formados, los resultados de su gobierno también serán desastrosos, tal como viene ocurriendo en Bolivia. El ser humano por naturaleza tiene algo de egoísmos, avaricias, ambiciones desmedidas, suele buscar el mayor provecho posible con el menor esfuerzo posible, etc. etc., estas debilidades o apetencias humanas se las puede aminorar o disminuir sustancialmente mediante las aulas y la correcta educación y orientado por el lado de la moral desde la edad escolar, no existe país perfecto ni hombres perfectos, pero intentar hacer bien las cosas para darle mejor calidad de vida a la población sería lo óptimo.
Los que vayan a gobernarnos próximamente 2025-2030 se enfrentaran a grandes e inmensos problemas que a lo largo de no solo estos últimos 17 años nos fueron dejando los gobernantes a su turno. Vimos que el sistema de gobierno estatal marxista de izquierdista no dio resultado en ningún país, solo llevó hambre, miseria, muerte, ignorancia, alta corrupción, incremento del narcotráfico y demás calamidades. El sistema de gobierno liberal y democrático es el que mejor resultado da, no es perfecto, pero es el que mejores benéficos brinda a la población, esto lo vemos en países europeos y en los que no son alineados con Rusia, China, Irán, Cuba o Venezuela.
El presidenciable tiene que ser de preferencia estadista, empero, sí debe ser inteligente, estratégico, transparente, flexible, líder, profesional académico deseable con maestría en economía, administración, derecho o ciencias políticas, no es suficiente licenciatura, debe querer servir al país, no servirse del país, joven, de nueva generación, no los que ya tuvieron su oportunidad y no pudieron, debe tener aires nuevos y modernos de administración, que tenga los pantalones bien puestos y no le tiemble la mano para poner orden el país, que sea visionario, alta capacidad integra de análisis, previsor, que sepa trabajar en equipo y sepa delegar, planificador, que sepa dirigir con autoridad, no con autoritarismo, que sea democrático, que sea practicante de la economía de mercado libre, que tenga valor de cambiar el país para bien, debe ser un conocedor del ámbito público, sea amante de la verdad, honesto, ético, con valores morales y practicante de sanas costumbres, empático, identificado con todas las clases sociales, que haga accesible fuentes trabajo a los más desposeídos; ojalá esa persona ya esté entre nosotros, ¿o iniciaremos el tercer centenario sin pena ni gloria en la mediocridad como seguimos los 200 años trascurridos como país?
¿Qué problemas debe enfrentar el nuevo presidente a su llegada?, veamos en resumen algunos.
EDUCACIÓN, es conocido por propios y extraños que la educación en nuestro país está muy, muy lejos de los estándares de calidad internacionales, PISA-Programa para Evaluación Internacional de Alumnos, mide año tras año sobre rendimiento en lectura, matemáticas y ciencias en 79 países, desde la era Evo nuestro país no hace que sean evaluados independientemente la calidad educativa, aduciendo que es capitalista y privatizador, esto seguramente para ocultar las grandes deficiencias y lo orientadas que están políticamente al Foro de San Pablo, es de pilar fundamental reorientar a largo plazo como base en la formación de profesionales de calidad altamente capacitados con miras al siglo XXI.
SALUD, la salud en Bolivia parece no tener cura, es el titular del matutino La Razón de 27/8/2023, “a pesar del colapso del Sistema de salud, no se vislumbran condiciones propicias para la discusión de una nueva política en esta área”. Es por demás conocido por la población el estado deplorable del sistema de salud en Bolivia, el estado lamentable de cómo es administrada la CNS y los sistemas de salud en el país y los bajos presupuestos en el área, en este campo apenas se hace ciencia e investigación.
RESERVAS INTERNACIONALES, es una caja de pandora, ahora apenas se informa sobre su composición, Oro, DEG o divisas, el 2015 alcanzaba a 15.000 millones de dólares, a hoy está en 3.158 millones (abril de 2023/último dato del BCB), entonces hay una caída estrepitosa de las reservas, no sabemos cuánto existe en oro, cuanto en DEGs y cuanto en divisas.
ENDEUDAMIENTO, según el BCB, la deuda externa a mayo/2023 alcanza a US$13.327 millones de dólares, y la interna a noviembre/2023 a US$15.155 y las empresas estatales adeudan US$6.148 millones a junio /2022; el estado espera llegar a un PIB de US$46.469 millones, entonces salta la pregunta, ¿a cuánto alcanza del PIB la deuda total del país?, está rondando el 75% que a fin de año podría superar el 80%. (LAMENTABLEMENTE EL GOBIERNO NO BRINDA INFORMACIÓN ACTUALIZADA Y OPORTUNA PARA UN MEJOR Y CABAL ANÁLISIS)
Sumado a esto, el contrabando de combustibles y la subvención de carburantes a cooperativistas mineros que no pagan impuestos, solo pagan el 2,5% de regalías que es de por sí ya irrisorio, muy por debajo de cualquier ciudadano común (IVA 13%, IT 3%, IUE 25%, RC-IVA 13%, etc.) con ingresos mucho menores que los auríferos que mueven millones de dólares en oro. Existe una marcada escasez de divisas, no se está sabiendo con que pagar la importación de combustibles a los proveedores de afuera.
Mantener en funcionamiento un país requiere de miles de millones en divisas, no escasos como los que existen a la fecha, que ya se sienten con largas filas para llenar los tanques de gasolina y diésel, y no son recientes; por ejemplo, el agro requiere para cosecha y zafra 600 litros para 40 a 50 hectáreas, sin embargo, el gobierno solo les da el 20% (120litros), entonces esto puede traer serias consecuencias en la captación de divisas y el agro en general.
CALIFICACCION DE RIESGO, La Standard & Poors con su análisis independiente, bajó la calificación de riesgo de Bolivia de ´B-´ a ´CCC+´, situándola en “perspectiva negativa”, justificó que “es debido a la disminución de exportaciones”, “limitadas reservas internacionales”, a “altos déficits fiscales y escasa transparencia sobre los activos del BCB” que “aumentan los riesgos para el servicio de la deuda”.
COMBUSTIBLES, La era del gas ya pasó, por lo menos hasta que se haga nuevas exploraciones que son muy costosas y llevan mucho tiempo e inversiones elevadas el hacerlas, y si se llegar a explotar. Arce en agosto decía, (LATAM PETROLEO & GAS 31/8/2023) “que desde el 2014 hay una declinación en la producción de gas natural, que lamentablemente ha ido cayendo hasta tocar fondo” y que, “el país no tiene capacidad para producir mas”. (S.SOLAR BOLIVIA -JULIO/2023) El Embajador de Argentina señala que dejará de comprar gas a Bolivia a partir de 2024 debido a su proyecto de abastecimiento con el pozo de Vaca Muerta allá en su país, esto representa menores ingresos en divisa para Bolivia, sumando a esto, el alto gasto público, crédito interno cada vez más creciente y reservas netas internacionales en reducción preocupante.
El alto costo de las subvenciones a los combustibles en la última década representó us$6.796 millones de dólares (LA RAZON 29/NOV/2023). El día lunes Luis Arce señalo que “el precio que se está pagando por la importación de combustibles es descomunal”. A marzo de 2023 el sector aurífero se beneficia con US$500 millones de dólares en subvención al diésel y apenas; tributa el 2,5% en regalías (70 millones) comparado con lo que exporta, según el INE 3.033 millones de dólares, entonces, resulta irrisorio comparado con lo que tributan otros sectores con menores ingresos; sumado a esto el alto contrabando hormiga en minibuses, 10 operadores de refinerías y 2 administradores que hurtaron del mismo YPFB 91 mil litros, haciendo figurar en registros como “mermas “, entonces, ¿por quienes debería comenzar el levantamiento subvenciones?, además de una lucha frontal contra el contrabando, que “recién” se dieron cuenta que había existido, cuando esto data de hace más de 15 o más años.
EMPLEO E INFORMALES, el gobierno dice que somos el país con menor tasa de desempleo, empero, con las mismas cifra del gobierno se demuestra que el 81,33% son informales, si sumamos a los que no tienen ningún trabajo llegamos al 87% de la población en edad de trabajar que se emplean y autoemplean de manera individual sin apoyo del estado, muchos miles de manera precaria, de subsistencia y sin prestaciones sociales de ley, que a su vejez no tendrán una pensión de jubilación, a ellos no se los puede llamar empleados; solo el 13% de la población en edad de trabajar está en la formalidad con prestaciones de ley y que contaran con una pensión para su jubilación. Esta es otra de las tareas imperiosas para el próximo gobierno, reducir de manera sustancial ese 87% e incrementar ese 13%, ello implica el fomento de la formación de nuevas fuentes de empleo formales, el estado no puede absorber toda esa mano de obra precaria y ociosa, no mediante bonos, ya tiene por demás superpoblado en exceso el aparato estatal, gobernaciones, alcaldías y empresas estatales; el estado debe cambiar de modelo económico, vimos que el estatista es un fracaso en cualquier parte, el estado debe cambiar al liberalismo y libre mercado, dejar a los capitales privados la creación, fomento y el empleo, el estado solo deber dictar, dar normas generales, supervisar, velar por los empleos, la correcta inversión, creación de factorías e industria en las áreas que el estado requiera para entrar en una industrialización verdadera, debe flexibilizarse sustancialmente la parte impositiva tanto para capitales extranjeros y nacionales para hacer atractivo el invertir en Bolivia, darles seguridad Jurídica y laboral clara que garantice sus inversiones, ganancias y empleo digno para los trabadores; el estado solo debe estar inmerso en las áreas estratégicas y de seguridad nacional.
BALANCE COMERCIAL, en cifras del INE entre enero y abril existe un déficit comercial de us$134 millones, exportaciones 3.590 millones y 3.724 millones en importaciones; a junio el déficit comercial fue 78 millones de dólares.
CORRUPCION, este monstro de muchos tentáculos que pisa fuerte, enraizado en el mismo gobierno, ¿cuánto representa en perdidas económicamente para el país?, trae tantos males, desgracias y muerte. En el 2022 Bolivia ocupó el puesto 126 entre 180 países en niveles de corrupción con una puntuación de 31/100, siendo pun puesto crítico, según le IPC-Índice de Percepción de la Corrupción.
JUSTICIA, el estado de la justicia es de los más deplorables en el mundo, según el Proyecto Mundial de Justicia (WJP), Bolivia ocupa el puesto 131 entre 142 países en cuanto al cumplimiento del estado de derecho de sus ciudadanos en 2023, y en América Latina y el Caribe ocupa el puesto 29 de entre 32 naciones, solo por delante de Haití, Nicaragua y Venezuela que son los últimos.
NARCOTRAFICO, la DW alemana, en su titular de junio/2023 dice: ¿Se ha convertido Bolivia en un “narcoestado”?
EMPRESAS ESTATALES, el estado siempre fue mal administrador empresarial, mas cuando en el país campea la corrupción, la improvisación la designación de ejecutivos con escasa o ninguna preparación académica en el rubro, los resultados es que están deficitarias, del 2007 a 2022, 17 empresas han acumulado pérdidas por 4.000 millones. Sobre la planta de urea, el costo de producción previsto en planta era de 210 us$ y el precio internacional de 204us$, de por sí ya se ve que no es rentable, y solo utiliza el 64% de su capacidad instalada, (El Diario sept/2023); la planta Quipus de 2013 a 2016 acumulo pérdidas por 18.4 millones de bolivianos (equipos que ni los personeros del gobierno, sus legisladores, ni sus empleados los compran.
Con el anterior resumen sobre el estado de cómo está nuestro país, surge la pregunta, ¿funciona el modelo económico actual que rige en el país?
* El presente artículo de opinión es de responsabilidad del autor y no representa necesariamente la línea editorial de Voz de la Diáspora.
* Juan Carlos Rodas Castillo es autor, entre otras publicaciones, del libro: “193 años de subdesarrollo, análisis y propuestas a la problemática de Bolivia”.