La nueva cepa se convirtió rápidamente en la más dominante del mundo.
Redacción Voz de la Diáspora
La variante Ómicron de coronavirus generó una gran ola de infecciones en Estados Unidos y ante el desconocimiento de sus características surgieron diferentes versiones sobre los síntomas que ocasiona, uno de ellos ha sido recurrente entre los infectados y se refleja en los dedos de los pies.
A diferencia de la cepa ya conocida, la variante Ómicron demostró ser más contagiosa, aunque afecta principalmente las vías superiores y rara vez llega hasta los pulmones. La mutación no causa la perdida del gusto ni el olfato y puede no provocar síntomas entre las personas vacunadas.
La variante Ómicron; sin embargo, sería responsable de los dedos de los pies COVID, llamado así popularmente por una manifestación inusual que genera lesiones moradas o rojizas y en algunos casos se ven ulceraciones en la zona afectada.
El nuevo síntoma es tan poco usual como la conjuntivitis, los estornudos y la diarrea entre algunos contagiados y la comunidad dermatológica de Estados Unidos todavía no tiene una explicación para las lesiones documentadas por el Hospital General de Massachusetts de Boston.
La afección inicia con la decoloración de la piel, que puede levantarse levemente y causar infecciones. El síntoma puede trasladarse también a las manos y causar la sensación de que la piel está caliente, genera ardor o picazón.
Cómo apareció este síntoma
Las investigaciones no logran determinar cómo surgió esta afección; sin embargo, algunos médicos coinciden en que la condición aparece por la inflamación generada con la variante Ómicron.
Esta condición puede aparecer entre las piernas, especialmente en zonas donde hay temperaturas frías. La inflamación puede aparecer con protuberancias en la piel y hay quienes dicen que se debe a coágulos de vasos sanguíneos, que pueden ocurrir en pacientes con coronavirus.
La variante Ómicron se convirtió en la más dominante en mundo, surgió en Sudáfrica y ha causado una nueva ola de contagios que afectó a la mayoría de países, que vieron saturada la atención primaria de sus sistemas de salud.