Por Kriscia Recinos
El expresidente de Argentina, Fernando de la Rúa, murió a los 81 años de edad. Desde hace varios meses estaba internado en una clínica de la ciudad de Buenos Aires, y en los últimos días su estado de salud empeoró tras una descompensación cardíaca y renal.
El presidente Mauricio Macri confirmó la noticia por su cuenta de Twitter: “Lamento el fallecimiento del ex presidente Fernando de la Rúa. Su trayectoria democrática merece el reconocimiento de todos los argentinos. Acompañamos a su familia en este momento”, escribió.
De la Rúa fue hospitalizado el 1 de enero de este año por un problema cardíaco, por el que fue operado, luego se requirió hacerle una traqueotomía y su condición se mantuvo estable pero grave.
Presentó varios problemas coronarios, incluso durante su mandato.
La última vez que se le vio públicamente fue en la cumbre del G20 en noviembre del año pasado, en Buenos Aires. Participó de la gala en el Teatro Colón.
El exmandatario fungió al frente del estado argentino entre 1999 y 2001, dejó su cargo durante la peor crisis económica en la historia del país suramericano.
Fue un 19 de diciembre de 2001 que De La Rúa declaró estado de sitio, renunció a la presidencia y salió de la Casa Rosada en helicóptero.
El entonces presidente dijo en una transmisión oficial, estar consciente del “sufrimiento de la gente” y que sabía distinguir entre “los necesitados y los delincuentes”.
A solo minutos de sus declaraciones, los argentinos salieron a las calles a protestar hasta la Plaza de Mayo. En dos días de violencia se reportaron 39 personas muertas.
Cuando De la Rúa renunció a su mandato fue nombrado presidente provisional, el peronista Ramón Puerta; a quien luego sucedieron Adolfo Rodríguez Sáa, Eduardo Camaño y Eduardo Duhalde.
El 25 de mayo de 2003 asumió el poder Néstor Kirchner.
Fernando De la Rúa tuvo una larga carrera política. Antes de ser presidente fue el primer jefe del gobierno de la ciudad, senador, diputado y candidato a vicepresidente en 1973.