Get Back: Los Beatles en 1969, un concierto en la terraza

Los Beatles, el concierto de 40 minutos que realizaron en la terraza del edificio de la disquera Apple en Londres en enero de 1969.Foto: Cortesia.
Por Alberto Barrera

Pittsburg, California – Lo que más me gustó del largo documental Get Back de Los Beatles fue el concierto de 40 minutos que realizaron en la terraza del edificio de la disquera Apple en Londres en enero de 1969.

Lo demás, casi ocho horas, fue tedioso, aunque hay que reconocer que los cuatro músicos hicieron lo posible porque no lo fuera, pero lo fue. Pese a la publicidad de Disney.

Con las palabras “fantástico”, “íntimo” e “histórico” el cineasta ganador del Premio de la Academia Peter Jackson describió las 57 horas de video y 130 horas de audio que revisó para realizar el documental, sin duda una ardua labor, pero otra cosa es cómo lo recibió el público y los comunicadores.

En el escenario improvisado de la terraza de los estudios de grabación Apple, Los Beatles dieron su último concierto ante atónitos transeúntes, empleados o residentes en los alrededores que encendieron su entusiasmo por la banda o llamaron a la policía por el ruido que hacían y que no les gustaba. 

Fue un intento importante de sentar a los “fab four” de Liverpool para motivar su creatividad o ensayar para ese concierto que discutieron y que podría haberse realizado en un antiguo teatro en Sabratha a orillas del Mediterráneo en Libia, pero que al final fue en esa terraza cuyas imágenes y audios se oyeron en la película Let it Be de 1970 junto al larga duración del mismo nombre. Ese año se separaron. 

Durante un mes lo intentaron, pero solo en 22 trabajaron o bromearon. Fueron chispeantes a ratos, o ensimismados en otros. Creativos o enredados, se divirtieron o discutieron, analíticos o superficiales. Intentaron parecer alegres con tanta cámara a su alrededor en un enorme estudio de Twickenham que más parecía una bodega industrial.

En uno de los momentos tensos George Harrison se va furioso y Paul con Ringo hablan con los ojos vidriosos. Paul cree que es el fin de la banda. Pronto los otros tres se mueven, especulan, se reúnen los cuatro en casa de Ringo y no logran acuerdos. Luego vuelven y siguen rasgueando sus guitarras, tocando los bombos y platillos, ensayando en el piano o los teclados, o tarareando alguna de sus melodías y se ayudan en la creatividad de memorables temas.

Beben te, vino, refrescos o comen bocadillos, cosas sencillas que todos hacemos, pero algunos fans no creían que eran y son seres humanos, que viven y sienten, que se equivocan y rectifican, o no. Ese documento audiovisual que tardó tanto en mostrarse da mucho, pero los expertos esperaban más.

Pero otros exaltan el esfuerzo de los cuatro Beatles. “Se trata de una obra profunda, multidimensional y creativa por su propio derecho”, sostuvo Jered Hester en una columna en The New York Times.

“Las casi ocho horas de Get Back: son casi ocho horas de tedio sinfónico y revelación complicada”, escribió James Parker en The Atlantic.

Coincido que el excesivo tiempo en los tres capítulos deja mucho de la imagen y genialidad de los cuatro genios de la música, del desarrollo del rock cuando parecía acabado luego de la brillante década de los 50 en la que causó furor en el mundo, pero a ratos divierte y aporta datos del carácter de cada uno de los miembros de The Beatles.

Mientras que Alexis Petridis dijo en una columna en el británico The Guardian que “Get Back de Peter Jackson es una serie documental diseñada para abordar las preocupaciones de (Ringo) Starr” y alude a los demás integrantes: “Harrison es alternativamente hosco y quisquilloso… Lennon está visiblemente, sin alegría…Intentando valientemente alegrar las cosas”; y “McCartney sigue deslizándose hacia el engatusamiento pasivo-agresivo.”

Get Back muestra una imagen amplia, más feliz del proyecto de 1969 cuando la banda pretende crear y producir un nuevo álbum, ensayar las canciones e interpretarlas en vivo en el espacio de dos semanas, coinciden varios expertos en el mundo de la música pop.

Mientras en las alturas del edificio los Beatles y sus colaboradores, esposas, algunos amigos se recrean con sus canciones Get Back que surge espontánea en esas sesiones, Don´t let me Down y otros temas, incrédulos y fans se cuelan a otras terrazas y muchos miran hacia arriba y se detienen. Dos policías llegan airados a las oficinas en la primera planta y amenazan si no cortan la actividad.

Los dos suben y se quedan escuchando mientras Los Beatles tocan Get Back y Paul improvisa: “Get back Loretta porque tu mamá está enojada y te pueden arrestar”, aludiendo a los policías al cual se les une un sargento regordete al que la secretaria le dice que suba pero que se quede en el cuarto piso pues hay mucha gente en la terraza y podría sucumbir…sube sin entender el sarcasmo.

Con la policía presente cierran el concierto y se van. Vuelven el siguiente día a terminar las grabaciones del entonces LP “Long Play” que saldría al mercado el año siguiente.