Redacción Voz de la Diáspora
Estados Unidos – El miedo a la deportación es un sentimiento común para los migrantes en Estados Unidos, de acuerdo a una encuesta realizada por el Centro de Investigaciones Pew. Pese a que el Gobierno de Joe Biden se comprometió a una política más humana con los extranjeros, los cambios no son significativos.
El sondeo de Pew reveló cómo la zozobra se apodera de los migrantes en Estados Unidos. El 39% de los latinos temen ser deportado, puede ser que le ocurra a un familiar o conocido. La preocupación crece hasta el 79% cuando se trata de inmigrantes sin ciudadanía o residencia permanente.
Los hispanos de segunda generación son los que viven con más miedo a que uno de sus seres queridos tenga que volver a su país de origen, entre ellos la incertidumbre es del 37%. Cuando se trata de la tercera generación de latinos, el temor se reduce hasta el 18.
Respecto a los latinos que nacieron en el extranjero y se naturalizaron como estadounidenses, el miedo es del 34% y pasa al 28% cuando se consulta a los que nacieron en Estados Unidos.
Algo importante que señalaron los especialistas es que, el temor es mayor entre los hispanos más jóvenes que no cuentan con estudios secundarios y cuyos ingresos familiares están por debajo de los 30 mil dólares al año.
El centro de investigaciones explica que la población hispana en el territorio estadounidense asciende a más de 62 millones de personas, de las cuales al menos un tercio son inmigrantes.
Hace dos años el temor era aún mayor, el miedo a la deportación entre los hispanos era en el 44% y llegaba hasta el 76% entre quienes tienen sus documentos en regla. Estos datos son previos a la pandemia del coronavirus y durante la administración del expresidente Donald Trump.
Al menos 20 millones de latinos, es decir el 40% del total, son indocumentados. La encuesta revela que, el 53% de los mayores de edad latinos admitieron que conocían a alguien que vive en Estados Unidos sin la documentación.
Sin embargo, en 2020 la deportación de indocumentados desde Estados Unidos se redujo considerablemente, en comparación de 2019, pasó de 267 mil personas retornadas a 186 mil. Sin embargo, la comunidad hispana en la nación norteamericana esperaba que las expulsiones cesaran o se les ofrecieran oportunidades más accesibles, algo que no ocurrió.