Redacción Voz de la Diáspora
Panamá -La Inteligencia Artificial comenzó a redefinir la educación, marcando un antes y un después en las aulas de clase. Este avance tecnológico, está transformando la manera en que los estudiantes aprenden y por ende cómo las Instituciones y sus docentes enseñan, creando un entorno educativo más personalizado, inclusivo y eficaz.
A medida que las universidades integran la IA en sus sistemas, los estudiantes están comenzando a experimentar un aprendizaje adaptado a sus necesidades individuales.
Las plataformas de IA permiten que cada estudiante avance a su propio ritmo, reciban apoyo en tiempo real y accedan a recursos didácticos que se ajustan automáticamente a sus fortalezas y debilidades. Los docentes contarán con herramientas de IA que analizan el progreso académico de los alumnos y ofrecen recomendaciones para ajustar las metodologías de enseñanza.
“Lo primero es entender el uso de la inteligencia artificial y lo segundo el impacto en las profesiones y cómo está cambiando la naturaleza de cada profesión”, nos dice la Dra. Adriana Angarita, CEO de SénecaLab, institución de reconocido liderazgo en el ámbito de la educación superior en América Latina.
Agrega que se trata de incorporar la IA en los diseños curriculares no sólo a través de asignaturas específicas, que la utilicen y que pongan sobre la mesa las tecnologías emergentes que han cambiado la forma de ejercer la profesión, sino para incorporar aquellos aprendizajes que ya no se hacen de forma tradicional, y que requieren de un sistema automatizado con un enfoque en la analítica de los resultados.
“Por ello, es importante que en las instituciones educativas se tengan grupos de pensamiento por carrera para evaluar constantemente la finalidad y acompañar la construcción de los diseños curriculares, con expertos externos que faciliten estos enfoques como los que estamos incorporando”, señala Angarita.
Las aplicaciones de IA en la educación van desde asistentes virtuales que responden preguntas, hasta simuladores interactivos y realidad aumentada para explorar temas complejos en ciencias, matemáticas, idiomas y más. Esto fomenta una mayor motivación en el estudiante al hacer el aprendizaje más interactivo y cercano a la realidad.
La IA también está promoviendo un acceso más inclusivo para estudiantes con discapacidades. Con tecnología avanzada de reconocimiento de voz, sistemas de lectura para personas con dificultades visuales y traductores automáticos, la IA está derribando barreras y haciendo que el aprendizaje sea más accesible para todos.
Sin embargo, el uso de la IA en la educación también plantea desafíos. La recopilación de datos de los estudiantes para personalizar el aprendizaje plantea cuestiones de privacidad y ética. Por ello, las instancias reguladoras deben incorporar en sus regulaciones, el garantizar que las plataformas de IA cumplan con estrictos estándares de privacidad y seguridad de datos.
La llegada de la Inteligencia Artificial en las aulas no solo está transformando la educación, sino también el futuro de toda una generación que verá en esta tecnología un puente hacia un aprendizaje más eficiente, inclusivo y conectado con el mundo real.
Actualmente, el 88 % de las empresas en todo el mundo incorporan la Inteligencia Artificial para la gestión del talento.
Según el Informe anual sobre el uso de la tecnología en la educación de BlinkLearning, el 68% de los docentes asegura que la motivación en el aula aumenta con las TIC y su principal ventaja pedagógica es el acceso a un mayor número de contenidos.
Por lo tanto, el uso de la IA supone muchas ventajas para profesores y alumnos. Algunas de las aplicaciones que tiene la inteligencia artificial, comienzan con el diseño de programas de estudios avanzados, tutorías personalizadas, evaluaciones de forma remota, contenidos de aprendizaje personalizados, actualización de los conocimientos de los docentes, realización de predicciones de deserción estudiantil y recopilación y análisis de datos.
“La comunicación permanente con los diferentes actores es fundamental, tanto en el sector productivo como en los grupos profesionales. Una cosa es la empleabilidad y otra es la profesión. Además, los propios estudiantes pueden compartir conocimientos de cómo avanza el proceso con la nueva metodología”, advierte la CEO de SénecaLab.
Con la inteligencia artificial se abre un mundo de oportunidades a partir de estas nuevas necesidades, al tener abundante información analítica.
“Los estudios del impacto de la inteligencia artificial en las personas y en las sociedades son elementos que nacen ahora para empezar a crear nuevas formaciones, nuevos espacios de estudio y nueva analítica, donde las universidades serán las principales que pueden proveer ese tipo de espacios”, afirma la Dra. Angarita.