Por María T. Morales
El candidato demócrata Joe Biden, habló hoy a la nación, y aunque no se proclamó ganador, se mostró confiado en que será el próximo huésped de la Casa Blanca.
Han pasado tres días de las elecciones presidenciales de 2020 y la ciudadanía aún no sabe quién dirigirá el destino de los Estados Unidos en los próximos cuatro años.
Biden, quien se enfrenta a Donald Trump, del partido republicano, lleva ganados 264 votos.
En tanto, Trump, actual presidente quien busca la reelección, lleva 213, por lo que se ha mostrado inconforme y denunció un supuesto fraude electoral, aunque no mostró pruebas.
Con semblante tranquilo, y seguro de que logrará la victoria, Biden prometió que cuidará tanto de los que votaron por él y por los que lo hicieron en su contra.
Satisfecho por los 74 millones de votos a su favor, aseguró que “es un margen que está creciendo todavía”.
“Vamos a vencer con una gran mayoría a favor. 74 millones de votos más que nunca en la historia de los Estados Unidos”, dijo, y agregó que esta cantidad de votos son un margen de diferencia de 4 millones en comparación con Trump.
“Hemos reconstruido el muro azul en el centro del país”, afirmó, en alusión a Pensilvania, Michigan y Wisconsin, que en 2016 ganó Trump, pero que históricamente votaban por el partido Demócrata.
“Esto es un proceso lento”-el conteo de votos- señaló Biden y pidió paciencia. “Estas no son solamente cifras, son hombres y mujeres que hacen valer su derecho”, reiteró, al tiempo de prometer que cada voto será contado.
También declaró que han comenzado a trabajar para detener la pandemia del COVID-19.
Recordó, además que aunque las más de 240 mil vidas perdidas por la pandemia nunca serán recuperadas, trabajará por salvar otras vidas.
Nunca podremos medir ese dolor de tantas familias. Quiero que sepan que no están solos”, expresó.
También se refirió a los desempleados y prometió un plan económico centrado en el camino a la recuperación. “Tenemos que ser calmados pacientes”, instó.
“No tenemos más tiempo que desperdiciar en guerras partidistas”, señaló.
Se dirigió a sus opositores para recordarles que “podremos ser contrincantes, pero no enemigos. Somos americanos”, finalizó.