Por Dennis Aguillón
Francia – Desde el fallo que hubo en el sorteo para octavos de final de la UEFA Champions League y se tuvo que repetir y al Real Madrid le tocó el París Sant-Germain todo pronóstico determinaba una eliminación para el equipo merengue.
Cada martes o miércoles los dirigidos por el italiano Carlo Ancelotti jugaban cada eliminatoria a muerte, primero eliminó al todo poderoso PSG, en cuartos de final al vigente campeón, Chelsea, en semifinales al otro todo poderoso Manchester City, y si algo tienen en común estos partidos que el Real Madrid los ganaba en los últimos minutos con la afición apretando.
Con partidos de infartos, los de Madrid se clasificaban a la final de la Champions League, al frente tenían a otro equipo inglés, el Liverpool, donde iniciaba como favorito, pero era el Real Madrid, el equipo de las remontadas históricas.
La sede era Sant Denis, en París; Francia, los mejores equipos de Europa se enfrentaba, uno luchaba por la décimo cuarta y el equipo inglés, por la séptima “orejona” y demostrar ser el mejor club del mundo.
Con retraso por temas logísticos, dado que la afición de Liverpool tuvo problemas para entrar al recinto deportivo, el partido inició con más de media hora de retraso, sin embargo, comenzaba a rodar el balón, con un primer tiempo bastante equilibrado para ambos equipos con pocas opciones de gol y más disputado en el medio campo, así termina los primeros 45 minutos.
Fue hasta el minuto 59 cuando Valverde centró un balón para que el brasileño Vinicius Jr apareciera solo por banda izquierda para empujar la pelota, y así puso arriba el marcador para el equipo merengue.
El resto del partido fue de ida y vuelta, con ocasiones de gol para ambos equipos, siendo figura para los blancos el portero belga Courtois, tapando toda llegada de peligro, el Real Madrid también tuvo opciones de subir el marcador, pero con menos peligro.