Al anochecer, la policía de la ciudad y del capitolio, así como la guardia nacional, forzaron la retirada de los seguidores de Trump.
Por María T. Morales
Cuatro personas muertas, varios heridos, decenas de detenidos y daños materiales, es el saldo de la toma del Capitolio en Washington, a manos de seguidores del presidente Donald Trump.
Después de las elecciones, Trump prácticamente comenzó a prender fuego al repetir hasta el cansancio, un supuesto fraude electoral del que nunca presentó pruebas.
Hoy, sus seguidores pusieron la capital de la nación al límite, y las autoridades edilicias debieron decretar toque de queda para evitar que las turbas continuaran con la protesta e invasión del edificio del congreso.
Los congresistas, quienes hoy sesionaban para certificar los votos que dieron la victoria en noviembre pasado, al demócrata Joe Biden, aún se encuentran en el interior del edificio.
Aún se desconoce en que momento los funcionarios serán evacuados, ya que podrían correr peligro.