Redacción Voz de la Diáspora
El mandatario salvadoreño Nayib Bukele, ya se encuentra en Washington donde está previsto que este lunes,14 de abril se reúna en la Casa Blanca con el mandatario estadunidense Donald Trump, en lo que será la primera reunión con un mandatario latinoamericano de menara presencial en lo que va de la segunda presidencia de Trump.

Se espera que la visita oficial se lleve a cabo para “discutir la colaboración salvadoreña en el uso de su prisión de máxima seguridad para miembros de las pandillas Tren de Aragua y MS-13”, según anunció a través de una rueda de prensa la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt.
Además, hay expectativas en los temas de migración, ecolonomía, inversión, entre otros en la que la comunidad salvadoreña ha puesto sus esperanzas de obtener buenos acuerdos.
Salvador Sanabria, director ejecutivo de la Fundación El Rescate, en Los Ángeles, considera que el encuentro representa una oportunidad crucial para asegurar la estabilidad migratoria de más de 150,000 salvadoreños y sus familias amparados bajo el Estatus de Protección Temporal (TPS).
“Lo mínimo que esperaría de esa amistad que se ve entre el presidente Bukele y el presidente Trump es que se garantice la renovación del TPS mientras dure una posible segunda administración de Trump”, afirmó Sanabria.

Recientemente las autoridades salvadoreñas detallaron que, durante la visita del secretario de Seguridad Nacional estadounidense, Kevin McAleenan, se había prometido buscar una solución para los salvadoreños que actualmente cuentan con TPS, argumentando que las “buenas” condiciones que se estaban dando entre ambos países permitirían alcanzar un acuerdo.
El mandatario centroamericano publicó en un mensaje de su perfil en la red social X un video en el que se ve su avión aterrizando en la base aérea Andrews de Maryland, en las afueras de la capital estadounidense, y siendo recibido por la autoridad local y la embajadora salvadoreña en EE.UU., Milena Mayorga.
Se desconoce por el momento la agenda del mandatario hasta el lunes, día en que está previsto que se reúna con Trump.

En el marco de la gran ofensiva migratoria de Trump, Washington ha declarado que TdA está invadiendo su territorio y ha echado mano de una norma de 1897, la ley de Enemigos Extranjeros, para expeditar procesos de deportación de supuestos miembros de la organización criminal, la cual los expertos consideran incapaz de acometer semejante asedio sobre la primera potencia mundial.
Esa fue la ley que su Administración abanderó en un polémico operativo el 15 de marzo en el que envió al Cecot a 238 venezolanos y 23 salvadoreños a los que acusó, sin publicar pruebas, de ser pandilleros.
Posteriormente, las autoridades migratorias estadounidenses admitieron haber deportado por error a un salvadoreño llamado Kilmar Ábrego García, residente en Maryland, casado con una ciudadana estadounidense y al que un juez había prohibido devolver a su país.
El pasado jueves el Tribunal Supremo ordenó al Gobierno Federal asegurar su retorno, y este viernes, Trump mostró su deseo de acatar lo dicho por el máximo tribunal estadounidense, lo que apunta a que el anuncio de su repatriación tal vez podría producirse durante el encuentro con Bukele el lunes.
