Voz de la Diáspora
Brasil – El futbolista ha fallecido a los 82 años de edad como consecuencia de un cáncer de colon en el hospital Albert Einstein de São Paulo, donde llevaba un mes ingresado
Edson Arantes do Nascimento fue una leyenda, uno de los atletas más trascendentes en todo el planeta. El brasileño quedará por siempre en la eternidad como el rey que dominó por completo una era del fútbol.
El fútbol siempre ha sido un ámbito fértil para los sobrenombres de sus jugadores: desde Pulgas hasta Tanques, desde Toros hasta Matadores. Pero cuando se habla del Rey sólo hay uno: Edson Arantes do Nascimento, Pelé.
Símbolo del juego bonito brasileño, único futbolista que ganó tres copas del Mundo con la selección de su país y considerado por muchos el mejor jugador de la historia.
Desde que deslumbró a todos en el Mundial de Suecia 1958 con apenas 17 años, Pelé se transformó en ícono de la magia y el alcance global del fútbol, y se mantuvo así hasta sus últimos días, aunque su vida tampoco estuvo exenta de polémicas.
«A veces bromeo que sólo me faltó ir a la Luna, me faltó jugar en la Luna», dijo en un mensaje para recordar los 50 años de la Copa del Mundo de México 1970, la última que disputó y alzó con la camiseta 10 de Brasil.
Pelé pasó de jugar de niño con balones hechos de calcetines en la localidad de Baurú, a debutar en el Santos a la edad de 15 años. Marcó un gol en ese primer juego y más tarde también alcanzó la gloria con ese club que representó hasta 1974: dos copas Libertadores, dos Intercontinentales, cinco copas Brasil, una decena de campeonatos paulistas…