Redacción Voz de la Diáspora
El Salvador – Según una publicación de El Diario de Hoy hecha el 16 de mayo, la más reciente encuesta del Centro de Opinión Pública (COP), correspondiente a abril de 2025, revela una disminución significativa en la popularidad del presidente de El Salvador, Nayib Bukele. Según los datos, el 55% de los encuestados aprueba su gestión, mientras que el 44% la desaprueba. Este descenso representa una caída de 4 puntos porcentuales respecto a febrero de este año y de 24 puntos en comparación con marzo de 2024, cuando alcanzó un 79% de aprobación tras su reelección.
El estudio, basado en entrevistas en línea a 1,000 adultos, destaca que el 30% de los participantes reside en el Área Metropolitana de San Salvador y el 46% tiene entre 25 y 44 años. El analista Carlos Araujo señaló que, a pesar de medidas recientes como el aumento del salario mínimo y la exención del Impuesto sobre la Renta para salarios de hasta $550, la percepción negativa hacia el presidente persiste. Esto sugiere que la población continúa enfrentando problemas que atribuye directamente al mandatario.
Además, la evaluación del gobierno central muestra, por primera vez, un porcentaje mayor de desaprobación (51%) que de aprobación (46%). Esta tendencia negativa también se refleja en la percepción hacia la Asamblea Legislativa y su presidente, Ernesto Castro, cuya imagen desfavorable alcanza el 69%, frente a un 29% de percepción positiva. La desaprobación hacia el órgano legislativo se mantiene desde julio de 2024.
Entre los temas de coyuntura evaluados, la minería metálica y el uso del Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) destacan como los más rechazados por la población. El 68% de los encuestados se opone a la implementación de la minería metálica, cuya ley fue aprobada en diciembre de 2024. Asimismo, el 70% desaprueba el encarcelamiento de deportados en el CECOT.
Estos resultados indican un creciente descontento ciudadano hacia políticas y decisiones gubernamentales recientes. A pesar de las acciones emprendidas por el gobierno para mejorar la situación económica y social, la percepción negativa hacia la gestión presidencial y legislativa continúa en aumento.